Corte accede a investiguen posible favorecimiento de Valencia Cossio

Visiblemente molesto se mostró ayer el ex director seccional de fiscalías de Medellín Guillermo Valencia Cossio, por los señalamientos he-chos en su contra por la fiscal delegada ante la Corte Suprema de Justicia, Ángela María Buitrago, de que éste goza de una serie de beneficios como celulares, masajes, carros y salidas en carros oficiales y hasta la guardia por parte de un patrullero de la Policía Nacional. Valencia Cossio, recluido en la cárcel La Picota de Bogotá, es procesado por sus presuntos nexos con quien se ha dicho fue el segundo al mando de la banda de Daniel Rendón Herrera, alias “Don Mario”. Sobre las acusaciones de la Fiscal, Colprensa dialogó tanto con el ex fiscal, como con Gabriel Ángel Salazar, defensor de Valencia Cossio. A pesar del rechazo rotundo por parte de Salazar Gaviria y de Valencia Cossio a tales señalamientos, la Corte Suprema de Justicia decidió compulsar copias para que la Fiscalía y la Procuraduría adelanten las averiguaciones respectivas, para así determinar las responsabilidades a las que haya lugar. Por ahora, y ya casi con la paciencia a su límite, Valencia estudia si es posible adelantar algún tipo de acción contra la funcionaria. Por su par-te, el penalista Salazar Gaviria dice que esa no es una prioridad ni de él, ni de su defendido. Colprensa: ¿Qué hay de cierto en las afirmaciones hechas por la fiscal Ángela María Buitrago, en cuanto a los beneficios que dice ella usted goza? Guillermo Valencia Cossio: No es cierto, no tengo ningún beneficio. C: ¿Y de los carros que se dice usted se sirve? GVC: A mí me transporta el Inpec, como a cualquier aforado del pabellón F-sur de la Picota. C: Y en cuanto a las salidas a almorzar, ¿eso es cierto? GVC: No. Mire, yo sólo puedo salir de aquí en ese carro y en los recesos de almuerzo me lo traen hasta el salón de escoltas. En muchas opor-tunidades yo traigo mi almuerzo. C: Y acerca de los masajes a los que hace referencia la Fiscal, porque fue muy contundente, ¿o no? GVC. No, para nada. En este punto es bueno recordar que el Inpec tiene en La Picota un servicio odontológico, médico y de terapeutas. A mí me han hecho terapias por un luxamiento que tengo en el hombro derecho. Todo eso es por cuenta del Inpec. C: ¿Esas cree usted son las terapias a las que se refiere la Fiscal? GVC: Exacto. C: Y de las visitas de funcionarios del Inpec y de un patrullero de la Policía…; GVC: No. Ella se equivoca. La fiscal está confundiendo a un sobrino mío (Juan Camilo) quien por ser abogado, me ha acompañado en todas las audiencias. Él, por ser hijo de mi hermano (el ministro Fabio Valencia), tiene asignado un custodio que siempre está con él, por cosas de segu-ridad.