El agua que Rosa Elena Zapata recogió en Arauca ante la emergencia causada por el petróleo derramado en el río Arauca, comenzó a escasear este lunes, y lo que para ella es peor, “ya no tengo de dónde sacar más para todos”.
Rosa comentó que la falta de agua se ha tornado tan grave “que no sabemos como suplirla y en los establecimientos ya ha comenzado a escasear el líquido. La gente está comprando las pimpinas y abasteciéndose porque esto va para largo. Yo por ejemplo necesito que llueva para bañarme”.
Una de las medidas adoptadas fue la repartición de agua por los bomberos “pero lo están haciendo a las entidades solamente”, agregó Rosa.
Esta situación se repite en los municipios de Arauquita y Saravena, que tras el atentado del sábado del frente Efraín Pabón del Eln, cuando dinamitaron el oleoducto en el sector Cubará (Boyacá), en límites con Saravena (Arauca), provocó el derrame de crudo en los ríos Róyota y Arauca.
“Acá la gente está usando motobombas para sacar el agua de unos caños, pero no sabemos si esta agua es potable. Esperemos que se pueda tomar y no pase nada, porque si no terminaremos en el hospital mis dos hijos y yo”, dijo Ana González, residente en Saravena.
Pero una de las situaciones que más preocupa es que al río Arauca han llegado, poco a poco y durante los últimos meses, una gran cantidad de “personas que han invadido terrenos justo a la orilla del río. Ellos vienen de diferentes ciudades porque el Gobierno no les cumple con sus casas”.
En caso de presentarse un incendio por el petróleo derramado, estas casas terminarían incineradas tal y como pasó el 18 de octubre de 1998 en Machuca donde murieron 84 personas.
SE TOMAN MEDIDAS
A las 5 de la tarde de este lunes, Dumar Quintero, gerente de la empresa Emserpa, encargada de los servicios públicos y del abastecimiento de agua en Arauca, esperaba el resultado de un análisis del agua tomado en la mañana y enviado a la Universidad Nacional para conocer su grado de potabilidad, luego del derrame de crudo sobre el río. Quintero explicó que “estamos a la espera de conocer el resultado de la prueba. Con la ayuda de la Unidad de Salud determinaremos si se puede volver a restablecer el servicio por el que han resultado afectados los 100.000 habitantes del casco urbano de Arauca”.
Otra de las medidas de emergencia adoptadas por la entidad y Ecopetrol, es ubicar una malla protectora en la bocatoma ante la posible llegada de otra mancha de aceite más grande, “con lo que protegeríamos el acueducto para tratar de brindar el agua lo más rápido posible”, precisó Dumar Quintero. El ministro de Minas y Energía, Mauricio Cárdenas Santamaría, afirmó que “en la zona están las cuadrillas de trabajadores encargándose de la contención de la mancha de crudo”, al tiempo que rechazó de manera categórica los ataques. “Estas son acciones que afectan a la población y comprometen el acceso a un recurso tan vital como es el agua”, anotó.
ATAQUE A LAS PETROLERAS
El ataque al oleoducto Caño Limón-Coveñas, cuyo derrame de petróleo comenzó el pasado sábado a las 2 de la tarde luego del atentado, es el tercero que se presenta en menos de un mes.
Testigos del hecho relataron a EL COLOMBIANO que los guerrilleros llegaron hasta el oleoducto en el sector La Blanquita, zona rural de Cubará, en los límites entre Arauca y Boyacá y detonaron el artefacto “sin mediar palabra. Cuando menos pensamos fue que vimos salir el combustible y estas dos personas escapar en la misma dirección del río”.
Estudios realizados por el Centro de Seguridad y Democracia, señalan que en Colombia el sector petrolero es uno de los que más ha padecido los atentados que en los últimos dos años se ha incrementado. “Entre el 2010 y el 2011 los ataques contra la industria petrolera crecieron en 116 por ciento, y entre 2011 y 2012 aumentaron en 19 por ciento, contabilizándose en lo corrido del año 31 atentados contra ese sector económico”.
El gobernador de Arauca, Facundo Castillo, le solicitó a Ecopetrol un plan de contingencia para tratar de contener o aislar la mancha de petróleo que hasta este lunes seguía avanzando sobre el río. Ecopetrol informó que suspendió la operación del oleoducto, además, se ubicaron dos puntos de control aguas abajo del río Arauca, cerca a Caño Limón y se notificó a los Clopad de Cubará, Arauca, Saravena, Arauquita, al Crepad de Arauca y a las autoridades venezolanas con el fin de adelantar las acciones de prevención y mitigación respectivas.
El ataque del ELN al oleoducto, que permitió el derrame de crudo sobre el río Arauca, es una grave infracción al Derecho Internacional Humanitario porque afecta a bienes protegidos indispensables para la supervivencia de la población civil, como lo son las reservas de agua potable.
ANTECEDENTES ATAQUES AFECTAN LA PRODUCCIÓN
El presidente de la Asociación Colombiana del Petróleo, Alejandro Martínez, manifestó al periódico EL COLOMBIANO hace 20 días que el deterioro de la seguridad es evidente este año. “Los atentados contra el oleoducto Caño Limón Coveñas en Arauca, la quema de vehículos cisterna, en conjunto con los problemas en otras regiones, afectaron la producción que en mayo fue de 936 mil barriles diarios, 21 mil menos que en abril”, indico Martínez luego del asesinato de 5 trabajadores de Ecopetrol por las Farc en Putumayo.
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