En las cárceles de Colombia todo tiene precio: senador Galán

Una grave situación en materia carcelaria y penitenciaria en Colombia, denunció este martes el senador Juan Manuel Galán, al señalar que en las prisiones del país, donde existe un altísmo hacinamiento, todo tiene precio y la única ley que se cumple es la de la oferta y la demanda. 
¨Pareciera que la única ley que se respeta y se cumple en la cárcel fuera la ley de la oferta y la demanda”, afirmó Galán al participar en un debate de control político en la Comisión Primera del Senado, con participación del ministro de Justicia Juan Carlos Esguerra. 
Entre otras denuncias, el congresista señaló que la población carcelaria de Colombia asciende a 43.000 reclusos, mientras que las prisiones sólo tienen capacidad para 28.000, lo que significa que hay un exceso de 15.000 presos. 
Galán, quien aseguró que la crisis del sistema carcelario tiene 30 años y obedece a falta de voluntad política y brazos caídos, dijo que “el hacinamiento y el déficit en la prestación de servicios internos como agua, salud, alimentación, comunicación y capacitación, promueven la formación de un mercado negro por estos bienes”. 
Además, señaló que “las condiciones de trabajo en encierro, jornadas extenuantes y la desproporción entre el número de reclusos frente al número de guardias” son un “un caldo de cultivo para que quienes no tengan la excelencia moral necesaria acudan a actividades de corrupción”. 
En ese sentido explicó que actualmente en promedio en Colombia el número de guardianes frente al de presos es de uno por cada 18, cuando debería ser de uno por cada cinco reclusos. 
Entre otros ejemplos de cómo la corrupción prevalece en el interior de las cárceles, Galán citó que un preso en Bogotá pagó a la guardia penitenciaria dos millones de pesos para que le asignaran una celda, pero el beneficio le duró muy poco, “pues otro interno pagó una cantidad superior por la misma”. 
También denunció que “para el suministro de agua en un pabellón, los internos de la cárcel La Picota (Bogotá) deben pagar 5.000 pesos por interno a la guardia”, o de lo contrario “no tendrán el servicio”. 
En otros casos, señaló, los presos tienen que pagar para acceder a los cursos que sobre diversos oficios se realizan en las cárceles para ayudar a redimir las penas. 
En una de esas prisiones, explicó, un cupo vale un millón de pesos y son 50 cupos, o sea que los guardianes se ganan 50 millones de pesos con los cursos de resocialización.