Guerrilla asesinó a secuestrado, que su familia creía estaba vivo

Las autoridades exhumaron los restos de un hombre secuestrado y asesinado hace siete años en Melgar, por quien las Farc seguían exigiendo millonarias cifras de dinero aduciendo que continuaba en poder del grupo subversivo. Así lo informó el general Luis Alberto Páez, director nacional del Gaula, al dar a conocer que los restos del ganadero fueron exhumados en una montaña de Prado, Tolima, gracias a la información suministrada por un guerrillero desmovilizado del Frente 25 de las Farc, hace ya varios meses. El hombre dijo a las autoridades que sabía que el grupo al margen de la ley continuaba exigiendo dinero a la familia del ganadero secuestrado en 2002, pese a que lo asesinaron pocos meses después del plagio. Al ganadero se lo llevaron del sector de El Peñón y desde el momento del rapto empezaron a exigir gruesas sumas de dinero a la familia, que lo creía vivo y por ello accedía a pagar 20 millones de pesos a cambio de su libertad, pero esto nunca se dio. Los cabecillas del Frente 25 siguieron haciendo exigencias a la familia afectada, que, según informó el General, hizo los pagos en especie entregando cuatro camiones de ganado, sin que obtuvieran la libertad del comerciante. Una vez el guerrillero se entregó a las autoridades les dio las coordenadas del sitio donde había sido enterrado el ganadero, en una montaña del municipio de Prado, hasta donde se desplazó una comisión del grupo Gaula de la Policía y la Fiscalía, que luego de practicarle las pruebas de ADN confirmó que se trataba del secuestrado. Después de siete años de angustia esta familia por fin pudo dar cristiana sepultura al hombre que creían seguía vivo, pero secuestrado.