La operación “Camaleón” costó 2.500 millones de pesos

La operación ‘Camaleón’, la más reciente y exitosa del Ejército Nacional después de la famosa operación ‘Jaque’, tuvo un costo de 2.500 millones de pesos y según el general Óscar González, comandante del Ejército, de ese presupuesto se sacará un dinero que será la recompensa para el desmovilizado que dio toda la información sobre la ubicación de los cuatro secuestrados. Así lo dio a conocer el general González, quien además contó detalles sobre el operativo y mostró unas imágenes inéditas del momento en que el general Luis Mendieta, el teniente coronel William Donato, el coronel Enrique Murillo y el sargento primero del Ejército Arbey Delgado, son sacados de la zona de combate en un helicóptero. “Teníamos un plan específico, sabíamos cómo era la seguridad y el campo de combate; sabíamos cuántos terroristas estaban cuidando a los secuestrados y actuamos en el momento indicado para rescatarlos”, dijo el general González, además de calificar el trabajo del Ejército como “impecable”. Sobre la confusión que han generado algunos testimonios de los rescatados acerca de supuestos bombardeos en el momento de su rescate, el comandante del Ejército aseguró que “como el objetivo era únicamente rescatar a los secuestrados, nosotros no podíamos arriesgar su seguridad haciendo bombardeos en la zona”. Finalmente el general González confirmó la orden que el secretariado de las Farc ha dado para asesinar a todos los guerrilleros que estaban custodiando a los secuestrados. Agregó que por conversaciones telefónicas interceptadas, los altos mandos del grupo armado ilegal “se refieren a ellos en términos vulgares y soeces y dan la orden de asesinarlos”. Por esta razón, el comandante del Ejército reiteró que los planes de reinserción que ofrece el Gobierno son generosos e invitó a los guerrilleros a que se desmovilicen porque “ellos también están secuestrados” y agregó que “los estamos esperando”. Más detalles El general González narró que seis días antes de la operación de rescate, un grupo de hombres estuvieron arrastrándose por varios kilómetros en la selva hasta llegar al punto cercano al campamento donde estaban los secuestrados y poder observar todos los movimientos de los guerrilleros que custodiaban a los tres oficiales de la Policía Nacional y al sargento del Ejército. El alto oficial también narró que hubo helicópteros con altoparlantes en la zona que llamaban al teniente coronel William Donato e invitaban a los guerrilleros a que se desmovilizaran. El general González también contó que desde las 5 de la tarde del primer día de rescate, se les pasaron las motosierras a los hombres del Ejército para que hicieran el helipuerto y así poder sacar a los secuestrados del lugar, las cuales también sirvieron de señal para que Donato saliera de su escondite.