La noticia de la fecha de canonización se regó como pólvora y antes de las 7:00 a.m. la iglesia del santuario de la Madre Laura, en Belencito, se vio colmada de feligreses. La alegría fue la nota protagonista durante la misa que celebró el Arzobispo de Medellín, monseñor Ricardo Tobón Restrepo, visiblemente emocionado ante el hecho de que "una colombiana sea presentada en todo el mundo como modelo de vida cristiana".
Explicó que la canonización de una persona es un verdadero acontecimiento. "Mostrar cómo una persona de nuestra raza humana, que ha pisado nuestro mundo, que ha compartido nuestras alegrías y tristezas, ha podido realizar su proyecto al estilo de Jesús y ahora vive en la gloria de Dios".
Por su parte la Hermana Ayda Orobio Granja, directora General de la Congregación Hermanas Misioneras Madre Laura, destacó detalles de la vida de esta "hija insigne de Colombia que nació, vivió y murió en nuestra patria entre 1874 y 1949. Supo hacer vida en el Evangelio de Jesús de Nazareth integrando de forma creativa el amor a Dios y el servicio a las poblaciones más discriminadas de su época, los indígenas, el palenque de Uré y sectores urbanos marginados".
Agregó la superiora que la Madre Laura ideó el método pedagógico adecuado para acercarse con respeto y amor al pueblo indígena, valorando sus tradiciones y costumbres, al tiempo que les anunciaba la buena nueva de Jesucristo.
Destacó así mismo, dentro de los perfiles de la primera santa colombiana, los de maestra, misionera, escritora y mística, autora de 21 libros.
Para la Hermana Carmen Uribe, exsuperiora y actual integrante del Consejo Superior de la Congregación, la noticia de la canonización de la Madre Laura "se enmarca justamente en el año de la fe. Y también, al interior de la Congregación, de la celebración de los 100 años que vamos a celebrar el 14 de mayo de 2014. Doble razón entonces para que este anuncio adquiera fuerza y dinamismo a nivel interno, espiritual y en la proyección apostólica que actualmente realizamos en 21 países en América, África y Europa".
Los rostros de los presentes estaban iluminados, radiantes, como estaba el médico Carlos Eduardo Restrepo Garcés, en quien la Madre Laura obró el milagro por el que la santifican.
LA MICROHISTORIA
LO QUE ADRIANA HEREDÓ DE SU TÍA
Aunque Adriana Upegui Márquez soñó de niña con ser monja, la vida se encargó de hacer que sus planes se truncaran. Sin embargo, y quizás con ese ADN que la emparenta con su tía abuela Laura Montoya Upegui, encontró su vocación en el servicio a la comunidad. Casada y separada, con dos hijos que son su norte y fortaleza, Adriana se dedica hoy a ayudarles a muchos otros a seguir el camino de la evangelización.
Como guía espiritual de la Fundación Antorchas de vida, en Medellín, vive y comparte la fe con quienes se sienten desamparados, como lo estuvo ella durante muchos años.
EN DEFINITIVA
Las hermanas de la Congregación Misioneras Madre Laura y el país en general celebran la noticia de la fecha para la canonización de la beata Madre Laura Montoya, el 12 de mayo en Roma.
Colombia
Madre Laura: un modelo de vida cristiana
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