En una ceremonia de excusas públicas, el director de la Policía Nacional, general Oscar Naranjo, pidió perdón a la familia de un hombre que fue violado y torturado por un agente de la institución en Armenia en 2004.
En ese año, un hombre fue conducido a un CAI en Armenia donde fue violado y torturado toda la noche por agentes y delincuentes que estaban recluidos en esa estación. Un año después de instaurar la denuncia la víctima desapareció.
Por esos hechos un juez condenó a la Policía Nacional a pagar 600 millones de pesos de indemnización a la familia de la víctima.
En la ceremonia, el general Naranjo se disculpó por el caso “por el desafuero, por la conducta indebida, reprochable, injustificable de un policía que tristemente defraudó y traicionó nuestros principios”.
El oficial se comprometió a verificar la información según la cuál el agente responsables, condenado a 14 años de prisión, está libre.
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