Rafael Correa espera invitación a posesión de Juan Manuel Santos

El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, sostuvo ayer que espera la invitación oficial para asistir a la ceremonia de relevo presidencial del próximo 7 de agosto en la cual el presidente electo recibirá la transmisión de mando presidencial de parte del actual presidente Álvaro Uribe Vélez. De acuerdo con el periódico digital del Gobierno ecuatoriano, El ciudadano, e Jefe de Estado ecuatoriano señaló que, como un acto de aprecio al pueblo colombiano, tratará de estar presente para la transmisión de Mando “si es que recibimos la invitación oficial” señala Correa. SOBERANÍA Y RESPETO Adicionalmente Correa indicó que este gesto se mantiene en el marco de la soberanía y el respeto. Sin embargo, el actual primer mandatario vecino recalcó que “hay cosas que Colombia se comprometió y todavía no cumple, como es la información completa de los hechos ocurridos el 1 de marzo de 2008”. Lo anterior fue mencionado a propósito de los bombardeos ocurridos en la región de Sucumbios, ubicada en la zona fronteriza colombo ecuatoriana, ocurridos en desarrollo de la operación Fénix en la cual el ejército colombiano dio de baja al canciller de las Farc, Raúl Reyes. A propósito del tema y con relación al futuro de las relaciones bilaterales, Correa expresó que “a nivel de país no podemos caer en el error de sin olvidar el pasado, tratar de ver el futuro común que siempre hemos tenido Colombia, Venezuela y Ecuador”. PRESENCIA DE MANDATARIOS Adicionalmente el recién nombrado presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, monseñor Rubén Salazar, expresó en entrevista a medios capitalinos que considera “sumamente importante” la asistencia de los gobernantes de Venezuela, Hugo Chávez y de Ecuador, Rafael Correa, a la entrega del mando al presidente electo Juan Manuel Santos. Esto, de acuerdo con Salazar, con el fin de avanzar en la normalización de las relaciones de Colombia con sus dos vecinos. No obstante el prelado expresó en tono de advertencia que una sola visita de los mandatarios vecinos no será la solución definitiva para el reestablecimiento y la normalización de las relaciones con lo vecinos. "Sería el comienzo de un camino para limar todas las asperezas, solucionar todos los conflictos y enfrentar todas las dificultades que se han presentado, observó Salazar.