En la tarde de este martes, los padres de familia de los Colegios Montessori y Antares de Cartagena, ubicados en la Calle Real de Manga, se vieron sorprendidos por un grupo de agentes de tránsito que impedían estacionar para recoger a sus hijos en los planteles. La situación se tornó caótica por momentos, pues justo en la entrada que da sobre la Calle Real, al menos 6 policías de Tránsito grababan y tomaban fotos de los vehículos que intentaban aparcar a un lado de la vía y les ordenaban seguir circulando, mientras ellos se preguntaban cómo harían para reclamar a sus hijos.
Al interior del Colegio Montessori, maestros y directivas intentaban responder al llamado de los padres que escasamente tenían tiempo de decir el nombre de sus hijos desde la ventanilla de los vehículos antes de que uno de los agentes llegara a pedirles que se retiraran y tomaran fotos del hecho.
“Me informan que habían unos agentes de Datt en la zona con motivo de una campaña de prevención vial, pero cuando me acerco al lugar, observo que hay como 20 policías en toda la calle, pitando, parando el tráfico y ocasionando un caos. Una situación que rechazamos porque lo más correcto era que esta entidad se acercara y nos enseñara el proyecto a implementar, entabláramos un diálogo para luego pasar a un plan de acción pero eso nunca se dio”, señaló Betty Blanco, directora de Bienestar del colegio Montessori.
La vía, que es una de las más importantes del barrio, presenta una fuerte congestión entre las 2PM y 2:30PM, hora de la salida de los colegios. Hoy los padres, protestaron ante lo que consideraron como una medida extrema de la autoridad, pues según ellos, no tenían en cuenta que por esa entrada salen los niños más pequeños del Colegio Montessori y que es imposible que ellos salgan a buscar a sus padres a los vehículos, por lo que necesariamente los adultos deben detener sus carros. También se cuestionaron si no era mejor una medida pedagógica en lugar de imponer comparendos, cuando nunca antes se había presentado la autoridad.
“Ellos (agentes) nos mostraron fue una carta que correspondía a una demanda por parte de los vecinos de Manga por el tráfico en este sector. Pero la forma de actuar de estos agentes no fue la correcta, se pusieron de tú a tú con los padres de familia, habían niños llorando, no hubo coordinación, ni tacto”, agregó Blanco.
La falta de zonas autorizadas de parqueos en el barrio vuelve a ser un tema de controversia.
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