Así se cuidaron los partidos para la entrega de los avales

Los partidos políticos han adoptado diferentes controles para entregar los correspondientes avales a los candidatos al Senado y Cámara. La triste experiencia política del año 2006 que les llevó a conformar el llamado "Congreso de la vergüenza" obligó a que en esta oportunidad la mayoría de los partidos políticos de Colombia extremaran sus controles a la hora de entregar sus avales a los candidatos que tendrán para las elecciones del Senado y la Cámara el próximo 14 de marzo. Desde octubre pasado la mayoría de los partidos empezaron a conformar sus listas, a manera de borrador, y ya en enero de este año fue cuando tomaron las decisiones de fondo para ver a quién reciben o rechazan en sus partidos. Entre las principales consideraciones que tuvieron en cuenta, esta la de frenar la presencia de candidatos que hayan sido condenados, que estén en alguna investigación por las sonadas parapolítica o farcpolítica, pero también el no permitir que los familiares de estos estuvieran en esas planchas. Sin embargo, fue sólo un partido el que tomó la decisión de cerrar del todo las puertas a estos candidatos, Cambio Radical. Su jefe único, Germán Vargas Lleras, fue muy claro al anunciar la decisión: "Lo que nos interesa es tener los mejores en el Congreso, no cantidad". Según se pudo establecer, este partido le negó el aval a candidatos de dirigentes costeños que en la actualidad son procesados por la parapolítica, tanto en Sucre como en Bolívar. De acuerdo a Vargas Lleras, todos sus candidatos tuvieron que cumplir dos condiciones: por un lado demostrar que no tienen ningún proceso disciplinario o fiscal en curso, pero a la vez comprometerse públicamente a que no tienen ningún vínculo con la parapolítica y que su financiación será transparente. En el conservatismo Uno de los primeros partidos en hacer público el veto a candidatos fue el Conservador. En la segunda semana de enero el Directorio Nacional, Fernando Araújo, informó que no recibiría en sus listas a siete candidatos. Así mismo, tomó otra decisión con respecto a su lista de Senado, le negó el aval al abogado antioqueño Oscar Iván Palacios, quien se hizo popular por haber asesorado jurídicamente y haber ayudado a ingresar a la Casa de Nariño al ex jefe paramilitar y asesinado alias "Job". Palacios interpuso un derecho jurídico ante el Directorio Nacional reclamándoles que su hoja de vida es limpia y no tiene en proceso ninguna investigación en su contra. El trabajo de investigación de las hojas de vida de los candidatos conservadores estuvo a cargo del Comité de Ética, el cual revisó los antecedentes con la Fiscalía, la Policía, la Procuraduría y la Contraloría. Declaración en la U El Partido de la U, uno de los más afectados por el tema de la parapolítica en 2006, para 2010 se blindó. Para eso su nuevo jefe único, Juan Manuel Santos, anunció que la principal condición que tendrán todos los candidatos, en Senado y Cámara, es que firmen una declaración juramentada en que digan que no tienen ningún vínculo con la parapolítica. La norma se ha venido cumpliendo al pie de la letra, al punto que no se pueden inscribir en la lista sino hasta cuando entreguen esta declaración, el primer avalado fue el senador Carlos Cárdenas y posteriormente fue su cabeza de lista Juan Lozano. En la U igualmente se le hizo un seguimiento a los antecedentes disciplinarios y judiciales de los candidatos que se presentan por este partido. Partido Liberal En el caso del principal partido de oposición del país, el Liberal, la labor está en manos de su jefe y candidato presidencial Rafael Pardo, quien se ha dedicado a mirar una a una las hojas de vidas de los candidatos. Pardo en compañía del ex secretario general José Noé Ríos, le hacen además una revisión a los antecedentes de los postulados en la Procuraduría, la Contraloría y la Fiscalía. Además, Pardo está mirando la fuerza electoral que pueden tener los avalados, la idea es que sumen y fortalezcan al liberalismo en las regiones en donde se postulan y no que le resten, situación que sucedió con el magistrado del Consejo Superior de la Judicatura, Temístocles Ortega. Otros partidos En el Polo Democrático sus directivas no impusieron declaración juramentada a sus candidatos, sino que se ocuparon de exigirles la presentación de sus antecedentes. En el Partido de Integración Nacional (PIN), su presidente el senador Samuel Arrieta, aseguró que una de las estrategias que tuvieron para hacer controles en los nombres de los candidatos fue el subir sus hojas de vida a la página web de la colectividad, con el fin de que los electores pusieran sus quejas. Sin embargo, Arrieta no reportó si hubo alguna objeción a los nombres de estos candidatos.