Home


Desestabilización de la justicia

Fue precisamente el desacato al llamado de un despacho judicial el argumento que tuvo en cuenta la juez para confirmar la detención de Restrepo, porque en la misma decisión prácticamente desestima las razones de la Fiscalía para acusarlo de prevaricato, fraude procesal, y fabricación, porte y tráfico de armas, en el caso de la supuesta desmovilización del frente “Cacique Gaitana” de las Farc.
La audiencia del pasado jueves no sólo deja sin piso las razones dadas por Restrepo para huir del país, sino que le resta credibilidad a la teoría de los amigos del expresidente Uribe de que hay una conspiración del poder judicial contra él, materializada en el enjuiciamiento y encarcelamiento de sus colaboradores.
Poco después de conocerse la noticia de la salida del país de Restrepo, los colombianos se sorprendieron con la especie de proclama suya desde “la clandestinidad”, llamando a la desobediencia civil contra el poder judicial, y proponiendo una constituyente que reformara drásticamente la justicia y estableciera un período presidencial de ocho años con reelección indefinida, equivalente a una hegemonía autocrática, por no decir a una dictadura, como la de Venezuela, que tanto rechaza y condena.
Ahora nos enteramos por boca de su abogada defensora de que el excomisionado “está protegido por otro país” y que por eso una orden de captura internacional en su contra no procedería. La abogada dijo también a RCN que la medida de aseguramiento avalada por la juez es una “orden de captura mediática”, desestimando la seriedad e importancia de un despacho judicial e insinuando que hay colombianos que pueden pasarse la justicia por la faja.
Es un mensaje peligroso en un país que ha luchado durante décadas contra una subversión armada que también ha lanzado desde la clandestinidad proclamas contra las instituciones de la democracia y llamado a la insurrección violenta contra los gobiernos de turno.
Si un personaje de tanta relevancia nacional, que como alto funcionario del Gobierno trabajó para defender la democracia y la institucionalidad, ahora se declara en rebeldía y desconoce el ordenamiento jurídico, se abren las puertas para legitimar cualquier maniobra truculenta que los abogados sin ética ni moral hagan para burlar a la justicia, como es muy frecuente en Colombia.
El esfuerzo de años para recuperar la confianza del ciudadano en los jueces y fiscales se derrumba sin remedio no solo cuando aquellos no se portan bien, sino cuando alguien tan notorio como Restrepo enloda a la justicia y se niega a presentarse ante ella.
El principal argumento de Restrepo, la parcialidad (o más bien persecución) de la justicia en su contra ya no tiene asidero luego de conocerse la decisión de la juez 62, de manera que lo único digno y serio que puede hacer el excomisionado de Paz es dar la cara.
 

Comentarios ()

 
  NOTICIAS RECOMENDADAS