Es urgente reformar el sistema electoral

“La normatividad y las instituciones no pueden seguir so-portando la situación actual en la que el diseño del sistema y el régimen electoral no dota de transparencia ni claridad al proceso de elecciones”, CNE. La culpa de lo que pasa con los escrutinios y la cantidad de denuncias en torno a las elecciones del 14 de marzo pasado, no sólo es de la organización electoral, sino del mismo Congreso de la República, que tras conocer lo que se presenta previamente y después de los comicios, no ha sido capaz de modificar el Código Nacional Electoral. Así lo considera el presidente del Congreso, Javier Cáceres Leal, razón por la cual plantea la necesidad de establecer en Colombia una Ley de Escrutinios. El tema se planteó en un debate que se le hizo a la Registraduría Nacional del Estado Civil en el Congreso, por la demora en la entrega de los resultados de las elecciones a esa corporación. Aunque no se conocieron nuevas pruebas, el senador Luis Élmer Arenas se encargó de expo-ner, una a una, las irregularidades que consideró como fraude en beneficio de los candidatos del Partido de Integración Nacional (PIN), en el Valle. Según Arenas, en este proceso de corrupción electoral estuvo comprometida directamente la Gobernación del Valle en cabeza de su titular Juan Carlos Abadía, de quien divulgó un video en el que se reúne con un grupo de alcaldes del Departamento y el precandidato conservador Andrés Felipe Arias. En el debate, Javier Cáceres aseguró que parte del fraude electoral del Valle, Chocó, Atlántico y Bolívar, se hizo en los formularios E-24 (escrutinio municipal), en los cuales se registra la tota-lidad de los votos alcanzados por cada candidato. Además, Cáceres Leal cuestionó la contratación de supernumerarios por parte del organismo electoral. “Los supernumerarios los contratan para las elecciones y los escrutinios, y son los que más atentan contra la democracia”, dijo. Así mismo llamó la atención de los registradores, de quienes dijo hay algunos que se prestan para “torcer” los resultados. El Registrador Nacional del Estado Civil, Carlos Ariel Sánchez, explicó que solicitó al Go-bierno Nacional la asignación de 22.000 millones de pesos para la implementación del sistema de identificación biométrico de los sufragantes, con fundamento en el mapa de riesgo de fraude electoral elaborado por la Entidad como garantía de transparencia electoral para evitar el fraude por suplantación de electores. Infortunadamente los recursos no fueron asignados. “Hace agua” El presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), Marco Emilio Hincapié, sostuvo ayer de manera tajante que "el sistema electoral ha hecho agua" y se enfrenta a una crisis. Sostuvo además que la normatividad y las instituciones no pueden seguir soportando la situación actual en la que el diseño del sistema y el régimen electoral no dota de transparencia ni claridad al proceso electoral. Hincapié dijo en un conversatorio sobre las elecciones, realizado en la Universidad del Rosario, que hay que aceptar que con la actual normatividad "el que tiene más plata es el que con votos se ubica en un cargo" y para ejemplificar tal situación uso las votaciones del Valle del Cauca, de las cuales citó casos como la financiación irregular de campañas y el "inusitado incremento de vo-tos". Como solución a algunas de las problemáticas, el Presidente del CNE propuso contemplar la rea-lización de unas elecciones primarias para establecer un "orden de elección de los candidatos en las listas de los partidos, asegurar la representatividad y descongestionar los tarjetones y las elec-ciones". Y agregó que esto da mayor coherencia a las propuestas de los partidos, pues obligan a que los electores se decanten por un solo partido. Reformas Ante la presentación hecha en el Senado, el Registrador Nacional del Estado Civil, Carlos Ariel Sánchez Torres, rei-teró la necesidad de reformas estructurales al sistema electoral colombiano, así: 1. Propone sólo partidos con listas únicas y cerradas. Eliminar el voto preferente y conformar listas únicas y cerra-das. La escogencia de candidatos en consultas internas jalona el proceso competitivo y aumenta la fiscalización so-bre la influencia de dineros ilícitos al interior del mismo partido. 2. Senado con circunscripción nacional y regional. Debido a las diferencias culturales de cada región del país y a la posibilidad de que el régimen sancionatorio deje a una región sin representación, sería conveniente cambiar la cir-cunscripción electoral del Senado de la República para permitir la elección de un senador por cada departamento, además de los que se elijan por circunscripción nacional, sin aumentar el número de curules vigentes. 3. Prudencia frente al voto electrónico. La Ley 892 de 2004 ordena la adopción del voto electrónico en el sistema electoral colombiano; sin embargo, es conveniente tener prudencia frente a este tema, ya que cambiar el sistema actual de conteo manual de votos –que es tangible– por uno automático no es sólo escoger una “urna virtual”. Es mucho más que eso: es evitar la manipulación de los resultados y las posibilidades de suplantación de identidad, y eso implica tener la seguridad de que el sistema está blindado contra todo intento o errores de procedimiento. 4. Personal para las elecciones. La sentencia de la Corte Constitucional C-230A expedida en marzo de 2008, le exi-gió a la organización electoral pasar del bipartidismo al pluripartidismo. En ese orden de ideas, las próximas refor-mas deberían incluir disposiciones sobre temas sensibles como jurados de votación, comisiones escrutadoras y elección de delegados de la Registraduría en las distintas circunscripciones, entre otros. 5. Justicia electoral. Es importante definir las distintas instancias y competencias en temas como reclamaciones, re-cursos y procesos de nulidad electoral. 6. Circunscripciones de minorías. Se propone que la elección de minorías étnicas se realice únicamente donde ha-bite un número representativo de estas comunidades, y no en todo el territorio nacional. 7. Consultas internas de partidos. Es pertinente analizar si las consultas internas de partidos y movimientos políticos deben organizarse con votación abierta, en la que se habilite todo el censo electoral, o si por el contrario los partidos y movimientos políticos deben conformar su propio censo para que las consultas se realicen de manera cerrada y sean sus propios afiliados carnetizados quienes tomen decisiones sobre el futuro de los partidos. Mientras las con-sultas continúen realizándose de manera abierta, es imposible controlar qué partidarios y simpatizantes de partidos distintos a los que realizan la consulta participen en la jornada democrática.