Jhony Romero: quiero una Cartagena productiva

El candidato a la Alcaldía de Cartagena Jhony Romero Julio, que tiene el aval de Afrovides, le apuesta a una Cartagena productiva, humana y para todos.
Dice que es cartagenero y que quiere ser el alcalde de la ciudad para sacarla del estado de empobrecimiento en el que está sumida, donde la gente está desplazada hacia los cinturones de miseria. “Siento con mucha pena lo que está viviendo nuestra gente”.
El candidato a la Alcaldía de Cartagena Jhony Romero Julio, que tiene el aval de Afrovides, le apuesta a una Cartagena productiva, humana y para todos.
ecordó que hace muchos años uno de sus hermanos fue asesinado y que en esa ocasión dijo que trabajaría por la ciudad, que necesita de alguien que invierta en la gente, con amor, el respeto por el ciudadano, invirtiendo los recursos públicos en este propósito. “Esto nos llevarás a tener una ciudad más segura, más humana y más justa”.
Una de sus propuestas es que Cartagena sea productiva, que permita ser competitiva y que permita ascender socialmente. La idea es construir tres zonas francas sociales, propiedad de los trabajadores, que no pagarán aranceles ni IVA lo que facilita competir con otros empresarios. 
También habló de deporte, diciendo que una de las acciones que adelantará será reestructurar el Ider, crear las ligas distritales, las escuelas de deporte, campeonatos en las calles, cuadras y barrios. Fortalecer la participación de los estudiantes en los juegos intercolegiados.
Romero Julio dijo que su fuente de financiación son algunos amigos, y gracias a su trabajo. No tiene dineros de la mafia y cuenta con financistas.
Así mismo habló de su gestión en el Tránsito Departamental, la que ha sido muy cuestionada por sus detractores. “Lo que se hizo fue depurar la institución, y a mucha gente no le interesaba eso. Fui víctima de tres atentados. Los órganos de control no hallaron responsabilidad en malos manos de mi parte en esa institución, que pasó de recaudar 2 millones mensuales a 50 millones”, comenta.
Hizo un llamado a la familia para que apoye una candidatura que no está empeñada, sin ataduras.