La Procuraduría General de la Nación sancionó con suspensión por dos meses, convertible en multa, a Jorge Eduardo Londoño Ulloa, ex Gobernador de Boyacá, y con destitución e inhabilidad por 10 años a Raúl Alberto Cely, ex secretario de Hacienda de esa administración por irregulares que presuntamente se cometieron en el año 2006, en un contrato de publicidad suscrito con una sociedad deportiva de ese departamento.
Los comentarios surgieron ya que Londoño Ulloa es senador de la República por el Partido Verde y ocupó la última curul de las cinco que alcanzó la colectividad en Senado. Debido a ello, de salir este personaje, le sigue en orden la ex alcalde de la Calle, Mercedes Maturana, quien ocupó el sexto puesto.
Así las cosas, aunque aún es un caso hipotético, de darse una posible salida del senador Londoño ocuparía la quinta curul Verde, la bolivarense Mercedes Maturana.
Según la decisión de la Procuraduría, el senador Londoño tendría dos opciones, o sale del Congreso por dos meses o resuelve pagar la multa.
Lo que algunos entendidos consideran extraño, es el presunto desequilibrio jurídico entre las dos sanciones disciplinarias, ya que consideran que hubo dolo y que la medida no debería eximir al ex Gobernador por ser la cabeza de la administración departamental.
Además, el fallo de la Procuraduría en primera instancia ordenaba destituir a Londoño Ulloa del cargo de gobernador e inhabilitarlo para ocupar cargos públicos durante 12 años y al ex secretario de Hacienda Cely Alba durante 15 años.
Según los entendidos del tema, esto se podría configurar en un presunto prevaricado, en caso de que se compruebe.
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