Nueva ley abriría la puerta para el transfuguismo político

El proyecto de ley establece que los partidos se podrán liquidar o sus miembros podrán salirse de ellos, en caso de no estar de acuerdo con los planteamientos de la colectividad. Sin embargo, “hay un peligro latente de que los nuevos actores políticos afecten las grandes colectividades”, por lo menos así lo considera Óscar Fernando Bravo del Partido Conservador.
La iniciativa que será presentada en esta semana al Congreso, contempla que si el 60 por ciento de los miembros de un partido están inconformes, podrán separarse y constituir un nuevo movimiento, pero a clara que la división debe contar con previa autorización del Consejo Nacional Electoral. En el proyecto también se plantea la disolución de los partidos.
Según el representante de Cambio Radical, Germán Varón Cotrino “la iniciativa busca establecer que mediante un procedimiento democrático se pueda permitir la disolución de un movimiento político y así abrir la posibilidad para que los integrantes de ese partido puedan optar por otro equipo político”.
El parlamentario agregó que esta es una nueva oportunidad para que el transfuguismo político se vuelva a presentar en el país y aclaró que la iniciativa no es una norma que surja por la coyuntura del Puro Centro Democrático, pero puede terminar beneficiando al exmandatario Álvaro Uribe.
Por su parte, el representante Bravo dijo: “lo que pretendemos en principio todos es fortalecer los partidos, pero con esta iniciativa se va a permitir una desbandada de los partidos a movimientos ciudadanos lo cual desvirtúa la esencia partidista, que es lo que debemos conservar”.
Con respecto al transfuguismo Bravo dijo que esta iniciativa favorece esa práctica política y debilita los partidos. El parlamentario fue claro en que todavía no tiene una posición con respecto al proyecto pues se acogerá a lo que decida su bancada.
Carlos Arturo Correa, del partido de la U dijo que “este proyecto le da la posibilidad a aquellos que están en partidos pequeños puedan escindir y pertenecer a otras colectividades”.
Sin embargo, el congresista fue claro en afirmar que el problema de la iniciativa radica en que las grandes colectividades pueden sufrir los efectos negativos debido a la creación de nuevos movimientos ciudadanos como el Puro Centro Democrático del expresidente Uribe.