La tormenta que se desató esta semana al interior del Polo Democrático tras el cambio de postura del ex candidato presidencial Gustavo Petro, frente al nuevo Gobierno, dividió las opiniones entre los miembros de la colectividad en Norte de Santander. Para algunos, la invitación hecha por el senador al electo presidente Juan Manuel Santos a entablar un diálogo nacional sobre tierras, agua y víctimas, que se concretó el jueves con un encuentro entre los dos, debió ser consultada con el Comité Ejecutivo. Esto por cuanto, argumentan, el papel del Polo es de completa oposición y en ese sentido la decisión de establecer un acercamiento con el gobierno entrante requirió de la consideración de todo el partido y no centrarse sólo en posiciones personales. “Soy partidaria de que en la medida que haya una dirección que oriente y coordine se tiene que acatar lo que esa dirección defina. Nosotros no podemos andar como ruedas sueltas cuando se está dentro de un partido. Si hay una Dirección Nacional esa es la que debe decidir frente a las actuaciones que se den con el nuevo gobierno. No es el liderazgo personal el que va a construir partido, es el colectivo”, manifestó la ex candidata a la Cámara del Polo en el departamento, Miryam Támara. Para la dirigente sindical, independientemente de si los puntos que se le hayan expresado al electo presidente, por parte de Petro, son provechosos, viables o beneficiosos para el país, “las decisiones se deben tomar con la oficialidad que un partido amerita”. Támara insistió en que la decisión que tomó el senador debió abordarse internamente para así evitar la controversia y el debate nacional que se ha generado en torno a la propuesta y que sólo le hace daño a la unidad del partido. El coordinador departamental del Polo Democrático en esta zona del país, Crisanto Torres, coincidió con la ex candidata en que la actuación del senador Gustavo Petro debió ser consultada con las directivas de la colectividad. “No le veo mucho problema a que se le presenten las inquietudes al nuevo Gobierno, pero si me parece que se debe debatir y tomar una decisión en colectivo”, indicó. Torres hizo énfasis en que este tipo de discusiones pueden contribuir a generar más fisuras al interior del partido y por lo tanto insistió en que debe primar el diálogo interno para lograr consensos. APOYO A PETRO Otro sector del Polo Democrático en Norte de Santander, por el contrario, coincidió en respaldar y aprobar el llamado de Gustavo Petro al diálogo nacional. Entre los polistas que le manifestaron su apoyo al ex candidato presidencial está el diputado Ramón Elí Támara, quien es partidario de que la colectividad no puede cerrarse y negarse a la discusión de los temas de interés nacional. “Me parece importante la posición de Gustavo Petro porque ha hecho una propuesta muy interesante que debe sumarse al gran acuerdo que encabeza Juan Manuel Santos en torno a temas tan trascendentales como la reparación a las víctimas, tierras y agua. Creo que en eso es acertado Petro”, señaló el dirigente de izquierda. Támara lamentó la posición radical del Comité Ejecutivo y dijo que “El Polo no pude apartarse de la discusión de los temas nacionales. Creo que es necesario debatirlos con este Gobierno pues el hecho de que se firme un acuerdo no quiere decir que se deje de hacer oposición”. Por su parte, el ex candidato a la Cámara por esa colectividad Rómulo Cornejo, quien también se mostró partidario de la invitación a un diálogo nacional hecha por Petro a Santos, consideró que esta actuación no tiene por qué generar divisiones y afectar la unidad del partido. “Gustavo Petro ha manifestado abiertamente que no va a hacer parte de la burocracia del Gobierno. Lo que pasa es que los sectores radicales que están dentro del Polo tratan de maniatar y poner mordazas a sus miembros para que no expresen sus opiniones”, dijo. El miércoles de esta semana el ex candidato presidencial sorprendió con el envío de una carta al nuevo mandatario, Juan Manuel Santos, en la que lo felicitó por el triunfo obtenido en las pasadas elecciones del 20 de junio y le propuso iniciar una “discusión nacional” sobre tres temas “neurálgicos” para construir una democracia “estable y pacífica”. Estos son: tierra, agua y las víctimas. El jueves en la tarde y pese a la lluvia de críticas, el encuentro se materializó logrando un compromiso por parte de Santos de convocar a un diálogo nacional sobre los temas planteados por Petro. Durante la reunión privada, el electo Presidente de los colombianos también asumió el compromiso de mejorar el clima entre Gobierno y oposición.
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