"Responsabilidad de los problemas en elecciones es compartida entre gobierno y Registraduría": MOE

A su juicio los principales problemas son la financiación de campañas y la carencia de métodos efectivos de control a dineros de dudosa procedencia en la política. Nueve días después de haber realizado las elecciones del 14 de marzo y con los resultados ya más claros, la di-rectora de la Misión de Observación Electoral, Alejandra Barrios, habló sobre ese proceso, comentó las fallas y as-pectos positivos y se refirió al problema de dineros calientes en las campañas. ¿Qué balance hace la Misión de Observación Electoral de estas elecciones? En tres puntos. Primero, es muy positivo que acciones violentas no hayan afectado el proceso, a diferencia de otras elecciones. Segundo, lamentablemente en materia de riesgos como compra y venta de votos, participación en política de funcionarios públicos, financiación ilegal de campañas, publicidad y transparencia financiera tenemos los grandes lunares de las elecciones. Y tercero, punto malo que hace parte del escenario postelectoral, es la demora de resultados y los problemas con los contratistas. Esto aunado con los pronunciamientos del Gobierno, siembra dudas sobre la legitimidad del proce-so al abrir la puerta a acertijos sobre el escrutinio. El día de elecciones ustedes denunciaron la práctica recurrente de compra de votos, además hay partidos que piden reconteo de votos en zonas del país como el Valle. ¿Cómo ven eso? ¿Qué otras denuncias específicas tienen? En el tema de compra y venta de votos y de financiación de campañas nos llegó información desde el Amazonas hasta la Guajira. No es nuevo, pero ahora está de presente y preocupa. Como ha disminuido el tema de la violencia, otros riesgos empiezan a parecer con fuerza. Respecto a casos específicos es muy difícil decir sin medir, pues hasta los mismos candidatos se denunciaban entre ellos y las prácticas no son del todo comprobables y hay denuncias que pueden venir más del descrédito entre campañas. Sin embargo, hay casos el Valle, Tolima y ciudades como Sincelejo, pero esa información a los entes en-cargados de investigar. Ha sido muy sonado el tema de PIN en el Valle del Cauca, ¿qué está pasando allí? El Valle ha sido muy sonado porque se ha podido ver claramente que hay participación en política desde la go-bernación del Valle del Cauca y de algunos de sus secretarios que apoyaron claramente a candidatos del PIN. Esa historia es algo que se vive de manera clara desde finales de 2009. En el Gran Concierto de la Feria de Cali de manera recurrente se informaba sobre candidatos que antes eran de ADN y ahora son del PIN; por otro lado está la cantidad de propaganda política que se transfugó de ADN una vez le quitan la personería. Después está la grabación de video en donde el Gobernador del Valle está con un número importante de alcal-des y donde está presente Andrés Felipe Arias, allí uno de los temas que se toca es el apoyo a campañas políticas, lo que implica participación en política. Pasa todo esto y aparecen unos resultados de un partido que es nuevo y que no corresponde a la tradición de votación del Valle. Entonces cuando eso pasa uno se pregunta ¿o emergieron con una fuerza importante y repre-senta intereses regionales o hay intervención en política para captar apoyo o hay fraude electoral? Creo que esto úl-timo es lo que piensan quienes piden el reconteo, como Partido Verde, Compromiso Ciudadano y el liberalismo. Lo que vemos en la Moe es que esa votación se explica porque hay una cadena de hechos que ratifican un apoyo directo desde las autoridades gubernamentales del Valle. En el 2006 fue el paramilitarismo…; ¿puede ser la financiación ilícita de campañas el nuevo escándalo políti-co? Colombia tiene un gravísimo problema y un gran hueco en legislación electoral: no es obligatorio que las cam-pañas den información previa sobre el origen, el monto y el destino de recursos. Cuando uno cruza la opacidad de la información y la gran cantidad de recursos que se mueven en las campañas, donde muchas violaron el tema de topes electorales se tiene que los recursos pueden venir de tres vías: o son recur-sos legales que al violar los topes del CNE se vuelven ilegales, o vienen de corrupción pública en materia de con-tratos de alcaldías y gobernaciones o tienen procedencias ilegales como la mafia narcotraficante o de otros tipos de mafias, como la de la gasolina, las de transporte, etc. A pesar de que hay muchos pronunciamientos sobre financiación ilegal y violación de topes se ha evidenciado que las denuncias no llegan al CNE y a la Procuraduría ¿cómo atender eso para que haya reales investigaciones y sanciones? Allí hay una responsabilidad de los partidos que no han querido aprobar en el Congreso una legislación que ponga como requisito la entrega de estados de cuenta previos a las elecciones. Eso es uno de los temas que debe ser atendido después de estas elecciones: la financiación. Pero hay un tema que no pasa por sistema electoral ni por los partidos sino por la confianza que tienen los ciu-dadanos en el sentido en que cuando presentan denuncias no se vean afectados por ellas. Es un tema que pasa por la confianza en la Fiscalía y los entes de control y por el reconocimiento de las instituciones como un vehículo efectivo que lleve esas denuncias a resultados concretos. ¿Cuál es fue principal problema de este proceso electoral? Durante el proceso indiscutiblemente es el tema de financiación de campañas y la carencia de métodos efectivos de control a dineros de dudosa procedencia en la política. En el escenario postelectoral está el tema de escrutinios, que se hayan tenido que parar los preconteos, los pro-blemas en el software, la desconfianza suscitada al interior de los partidos y lo complicado del proceso electoral en sí. ¿Hubo garantías y transparencia en las elecciones? La institucionalidad, la policía, la defensoría del pueblo y diferentes organismos brindaron todas la garantías pa-ra que se pudiera ejercer el derecho al voto y que se pudiera hacer política libremente en todo el territorio nacional. Respecto a la transparencia hay fuertes fallas pero sería muy arriesgado señalar que los resultados de estas elec-ciones son ilegítimos. Por eso preocupa mucho que eso se diga desde las más altas autoridades, pues para someter a un país a que, tras un proceso electoral tan grande y tan costoso como este, sus resultados sean ilegítimos se necesi-tan pruebas contundentes. Sin embargo, sí creo que hay que hacer una revisión sobre los aspectos que por diversos motivos comprometen el proceso. ¿De quién es la responsabilidad de las fallas en las elecciones? Hay una responsabilidad compartida. Por un lado debería haber una responsabilidad en cuanto a transmisión de datos, tener plataforma de divulgación adecuada y sobre la seguridad del proceso que le corresponde a la Registra-duría. Pero por otro lado una responsabilidad compartida con el Gobierno Nacional, que es que la capacitación a los miembros de la comisión de seguimiento electoral se empiece a hacer inclusive desde un año antes de las elec-ciones. Eso significa que hay que revisar la agenda que se organiza desde Ministerio del Interior. Y que además CNE mantuvieron un tire y afloje con el gobierno en materia presupuestal por $22.000 millo-nes…; No solamente CNE sino Registraduría. Hay un avance que es muy importante hacer que es la identificación dactilar de votantes y eso era en parte lo que se pedía. Eso nos permitiría depurar el procedimiento y garantizar la adecuada identificación del ciudadano al momento del voto. No es bueno cuando se empieza a señalar solamente una institución por errores determinados, más aun cuando hay reducción presupuestal, pues unas elecciones implican a toda la institucionalidad del Gobierno en su conjunto.