Durante los últimos cuatro días de la Semana Santa, Playa Blanca estuvo repleta de visitantes. Tanto, que el jueves y el sábado la autoridad de tránsito tuvo que detener el ingreso de vehículos porque ya se había alcanzado el límite de ocupación. Lea aquí: (Cierran paso entre Pasacaballos y Barú por límite de vehículos)
Según explicó el Departamento Administrativo de Tránsito y Transporte (DATT) entre el jueves y el domingo entraron diariamente más de mil vehículos y en esa zona se presentó el reporte de “mayor represamiento vehicular” durante la Semana Mayor. Recordemos que la capacidad máxima por día en esta área protegida, es de 4.500 personas.
“La mayor afluencia de visitantes fue el viernes y el sábado. No tuvimos mayor inconveniente, pero la gente está produciendo mucha más basura, y esto a pesar de que se reforzó la jornada de recolección de residuos”, explicó el capitán de Corbeta Carlos Andrés Martínez Ledesma, jefe de Área Protegida del Parque Nacional Natural Corales del Rosario y San Bernardo.
El represamiento vehicular y la cantidad de basura que queda en Playa Blanca después de cada temporada turística, genera la pregunta de ¿qué pasó con la propuesta del cobro para la entrada vía terrestre a esta área protegida? La respuesta fue: está en desarrollo.
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“Por ahora estamos a la espera de tener todo listo para hacer la consulta previa con las comunidades y además ir pensando en la infraestructura de servicio, que incluye control de acceso, baterías de baños y casetas salvavidas”, explicó Martínez Ledesma. Lea aquí: (Cobrarán acceso a Playa Blanca)
Mientras tanto, indicó, se sigue realizando el cobro a quienes salen desde el Muelle de La Bodeguita.
El valor de ingreso y permanencia en el Área Protegida de Parque Nacional Natural Corales del Rosario y San Bernardo, es según tiene publicado Parques Nacionales en su sitio web, un cobro único de $7.500 pesos.
La propuesta de un puesto de control y un cobro para el ingreso a Playa Blanca por vía terrestre surgió a mitad del año pasado, después de la inauguración del puente que une a Pasacaballos y Barú. Esta estructura hizo más fácil el acceso a Playa Blanca y disparó la cantidad de personas que visitan esta área protegida.
OJO CON PLAYETAS
La zona de Playetas, contó el Jefe del Área Protegida de Parque Nacional Natural Corales del Rosario y San Bernardo, fue un dolor de cabeza la semana pasada. “Tuvimos taponamiento del acceso al pueblo de Barú, por la cantidad de ventas que se instalaron ahí, e incluso tuvimos que pedir apoyo de la Policía para despejarlo” explicó. Recordemos que Playetas está a punto de dejar totalmente incomunicado al pueblo de Barú, y en mayo del 2014 la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) negó la licencia para la intervención que permitiría desarrollar el proyecto “Obras de protección Litoral y Conexión Vial en la Isla de Barú”.
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