Alrededor de 250 niños en Bolívar nacen con alguna cardiopatía congénita. De estos, el 70% necesita cirugía. Solo el 10% se puede enviar a Bogotá para ser operado. El resto probablemente fallezca a temprana edad por no tener la oportunidad de ser operados.
Hoy, gracias a la gestión de Rotary International, el Hospital Napoleón Franco Pareja, más conocido como Casa del Niño, tiene una sala piloto para operar todo tipo de cardiopatías congénitas a menores de edad. Hasta el momento se han intervenido 12 niños.
La sala tiene equipos de alta tecnología y con personal especializado. Esta sala aún está en período de prueba, pero dentro de poco podrá operar a todos los niños del departamento y la región que necesiten este tipo de procedimientos. Por esta razón, y con el ánimo de supervisar el proyecto, llegaron a la ciudad los delegados internacionales del Club Rotario, que hicieron posible esta misión.
“New Heart” o “Nuevo Corazón”, es la denominación de este proyecto social que va a beneficiar a más de 9 mil niños anualmente, el cual se hizo a través de una cadena de relaciones internacionales que gestionó los recursos y aportó conocimientos.
La inversión de este proyecto fue de 260 mil dólares. Estos recursos los consiguieron dos gobernadores del Club Rotario suizo, un profesor norteamericano y una ciudadana suiza, todos rotarios.
“La Casa del Niño es el único hospital pediátrico que tiene la Costa Caribe. Este hospital, con el proyecto se convertirá en el único que atiende este tipo de operaciones. Por eso es de gran importancia”, expresó Rafael Tono Lemaitre, presidente del Club Rotario en Cartagena.
Para este proyecto se han unido tres continentes, 7 países y 15 clubes rotarios. El hospital recibirá a todos los niños que necesiten intervenciones, sin preguntar si tienen dinero. Esta es la principal característica de New Heart, un “nuevo corazón” para todos los menores que lo necesiten.
“El trabajo que hacemos es maravilloso. Llegué a Cartagena en 2003 y desde entonces he participado en proyectos con el Club Rotario de Cartagena. Lo más difícil es conseguir los recursos para hacerlo, por eso decidimos involucrar a otros clubes y sacar adelante el proyecto”, manifestó Douglas Flournoy, colaborador, gestor del proyecto y doctor en química.
Por esta razón
Urs Herzog, doctor en cirugía, miembro de Rotary Internacional y ficha clave del proyecto, manifestó que “fue un proceso difícil, en el que tuvieron que escribir muchos correos, hacer varias llamadas y contestar preguntas a las personas que querían que colaborar. Las personas que ayudaron fueron muy generosas y les interesó el tema por ser algo tan fascinante, se trata de niños, corazón y América del Sur. La gestión se hizo en menos tiempo del que pensábamos. Pudimos comprobar que efectivamente los equipos que conseguimos son de muy alta calidad”.
En el proyecto colaborarán Germán Spicker, Jaime Trucco Lemaitre, Urs Herzog, Max Herzig, Douglas Flournoy y Anne Marie Wunschheim, quienes explicaron cómo funciona la sala piloto del Hospital Napoleón Franco Pareja.
Los delegados internacionales se encargarán de la labor de interventoría en nombre de Rotary International y ya piensan en otros proyectos en Cartagena.
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