Un incremento nunca antes visto en los pacientes que ingresan por urgencias a la clínica Maternidad Rafael Calvo se ha registrado en estos últimos dos meses a raíz de la cantidad de migrantes provenientes de Venezuela.
Jorge Eduardo Quintero Bula, gerente de la Maternidad, explicó que de un estimado de 122 personas que se atienden a diario en urgencias, un 8% son venezolanos, en su mayoría mujeres embarazadas.
“Lamentablemente nuestro país vecino está pasando por una situación económica bastante difícil, lo que ha hecho que la población migre hasta Colombia.
“Diariamente en urgencias atendemos unas 122 personas que van a la clínica en busca de diferentes servicios, de las cuales el 8% son venezolanas. En este momento estamos hospitalizando una venezolana a diario y ahora tenemos internadas a tres mujeres por otras razones, lo mismo que también se han atendido trabajos de parto”, manifestó Quintero Bula.
“Peligro inminente”
El médico también aseguró que el hecho de que las venezolanas lleguen indocumentadas es una “catástrofe”, pues al no tener un monitoreo de su embarazo es riesgoso el parto.
“Cuando una de estas mujeres acude a la Maternidad la atendemos con un riesgo alto porque no sabemos qué control se ha hecho, no tenemos ecografías, ni ningún dato o información de ellas. Las venezolanas no pertenecen al sistema general de seguridad social, por lo que no tienen ningún tipo de afiliación y deben entrar por el servicio de urgencias, es decir, no se le puede hacer un monitoreo más especializado de sus embarazos”, dijo Quintero Bula.
¿Quién paga?
Aunque en estos momentos la Maternidad Rafael Calvo no ha recibido remuneración por la atención ofrecida a los venezolanos que han llegado por urgencias estos últimos meses, Jorge Quintero resaltó que por medio de un convenio con el Distrito se busca que más adelante el centro médico reciba su respectivo pago.
“Nosotros esperamos recuperar estos recursos en un convenio que estamos haciendo con el Distrito, porque hay que reconocer el esfuerzo de la Alcaldía y la Gobernación al cumplir con la normatividad que dice que cualquier persona en el territorio nacional que no esté afiliada a los sistemas es responsabilidad de los entes territoriales.
“En un proceso que se realizará más adelante se liquidará lo correspondiente a la atención a estos pacientes, pues aquí lo importante es prestarle el servicio a estas mujeres.
“De lo que sí pueden estar seguros es que no se harán discriminaciones de ninguna índole y se atenderán todos los partos con calidad, seguridad y humanidad”, concluyó el gerente.
"La necesidad me hizo venir"
Jessica Pacheco Martínez abandonó hace tres meses su natal Venezuela con el firme propósito de llegar a Cartagena. Con seis meses de embarazo, atravesó la frontera montada en un Jeep y solo hasta hace solo dos días dio a luz en la Maternidad Rafael Calvo.
“Solo pensaba en mi bebé y sabía que no podía tenerlo en mi país porque no tenía el dinero para pagar el parto. Yo soy de Zulia y extraño mi tierra, pero allá no contamos con respaldo para alimentarnos, vestirnos, educarnos y mucho menos para ir al médico. Estando allá solo me hice un control y un ecograma”, explicó.
Alexandra Hidalgo es otra de las mujeres en estado de embarazo que permanece hospitaliza en la Maternidad.
“Vine a aventurar hasta Colombia en busca de alimentación y oportunidades de vida. Salí embarazada aquí en Cartagena y en ese momento no contemplé la posibilidad de regresarme a Venezuela porque allá no encontraría respaldo para mi hijo, que nacerá en dos días”, contó Hidalgo a El Universal.
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