De carácter urgente se catalogó la intervención que necesita la Ciénaga de la Virgen a la altura de La Bocana, que perdió más de 10 metros de profundidad de 2007 al presente año, por la sedimentación.
Al impacto ambiental que supone la pérdida progresiva de este cuerpo de agua, se suma el hecho de que los peces estén a poca profundidad, lo que hace que aumente la presencia de aves marinas que ponen en riesgo la operación aérea, por la cercanía de la zona en cuestión a la pista del aeropuerto Rafael Núñez.
Para abordar este problema se reunieron en el despacho del personero distrital William Matson, representantes de la Procuraduría, EPA, Cardique, Aerocivil, la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA), Concesión Costera y de la comunidad de la Zona Norte para debatir qué acciones adoptar.
“Hay inseguridad aérea por la migración de las aves en la zona cercana a la pista y puede generar accidentes en el tráfico aéreo (...) la ANLA solicitó a la Concesión Costera (a cargo de las obra de la doble calzada Cartagena - Barranquilla) unos estudios para determinar si la sedimentación progresiva y acelerada se debe a la construcción de la obra”, explicó el personero Matson.
El funcionario destacó que no es la primera vez que se reúnen para abordar el tema pero que aún no se ha definido si la causa de la sedimentación es la obra que realiza la Concesión Costera en la zona o hay otros motivos.
Denuncias sin resultados
Laura Cantillo, directora de la Veeduría Nacional Afrocolombiana y quien estuvo en representación de la comunidad en la reunión, manifestó que este problema lo han denunciado formalmente desde febrero pasado y que ni las denuncias ni los señalamientos de la Procuraduría a la ANLA han logrado que se determinen acciones que mitiguen el problema o que se realicen los estudios pertinentes.
“Seguimos en lo mismo, dicen que la responsabilidad es de unos y de otros pero el problema es inminente, hace siete días el aeropuerto no puede controlar la cantidad de aves (...) necesitamos el respaldo de las autoridades ambientales porque Cartagena está viviendo un flagelo con la ciénaga que está en cuidados intensivos. La Bocana no tiene funcionalidad porque está colapsada”, indicó Cantillo.
Jaime Andrés Silva, gerente técnico de la Concesión Costera, señaló que el problema ambiental “es ajeno a las actividades de la concesión” y que esta se ha apegado a lo contemplado en la licencia ambiental otorgada por la ANLA.
“Presentamos la metodología de los estudios ambientales que fueron ordenados por la ANLA y estamos a la espera de su aprobación para llevarlos a cabo”, aseguró Silva.
“En estos momentos nuestro equipo del programa de control de aves ha aumentado la frecuencia de las inspecciones y actuaciones de prevención. Tenemos estrictos controles e inspecciones como parte de nuestro programa de seguridad operacional, con el fin de garantizar la seguridad de nuestras operaciones”, indicó Alcides Morales, gerente técnico operativo de la Sociedad Aeroportuaria de la Costa (Sacsa).
El director de Cardique, Olaf Puello, destacó que “hay que armonizar los esfuerzos, determinar las causas y tomar acciones inmediatas”.
Los miembros de las demás autoridades se negaron a dar declaraciones al respecto.
Representantes del Distrito se reunieron en la tarde de ayer con las entidades involucradas y tampoco se llegó a ninguna conclusión. Se les pidió a los involucrados estructurar soluciones a esta problemática.
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