Miembros de la realeza, embajadores y famosos como Beckham, pero también un carnicero inglés y un profesor de yoga de una isla caribeña: la boda del príncipe Guillermo y Kate Middleton mezclará varios mundos, a semejanza de los orígenes dispares de la pareja.
La joven descendiente de mineros y llamada un día a convertirse en reina “invitó a gente de su mundo”, resumió Robert Jobson, experto de la realeza.
Varios comerciantes de la localidad donde viven sus padres, Bucklebury -el carnicero, el tendero y el cartero- han recibido la lujosa invitación con las iniciales de la reina impresas en oro fino, según la prensa, puesto que el palacio no ha divulgado la lista de los 1.900 invitados.
Estarían igualmente convidados un profesor de yoga y un camarero de la isla Mosquito, un lujoso destino del Caribe apreciado por los padres de Kate.
Todos estos plebeyos asistirán a la ceremonia en la abadía de Westminster, cuyas primeras filas estarán reservadas a la abuela paterna del príncipe, la reina Isabel II, su padre el príncipe Carlos y su hermano el príncipe Enrique. Los Middleton también ocuparán los bancos de honor.
La familia de Diana, la madre del príncipe Guillermo fallecida en 1997, debería estar representada por su hermano, el conde Charles Spencer.
Las “ovejas negras” de las familias de los futuros esposos no recibirán el mismo trato. Sarah Ferguson, tía del príncipe Guillermo y ex esposa del príncipe Andrés, conocida por sus extravagancias, no fue invitada. En cambio, sí debería estar presente el tío de Kate, Gary Goldsmith, al que la prensa ha dedicado grandes titulares por sus noches hedonistas en Ibiza.
Entre los invitados polémicos hay algunos elegidos por el príncipe Carlos, como el banquero estadounidense Joe Allbritton, cuya entidad, Riggs, fue condenada por blanqueo de dinero.
Como manda la tradición, habrá también miembros de las familias reales extranjeras, entre ellos el príncipe Alberto de Mónaco y la reina Sofía de España, acompañada del príncipe Felipe y de su esposa Letizia.
En cambio, el príncipe heredero de Japón declinó la invitación debido a los mortíferos terremoto y tsunami en su país. Y el emir de Bahréin fue borrado de la lista a causa de la represión en el suyo, según la prensa.
Los novios estarán rodeados también de algunos famosos como el futbolista David Beckham, que promovió sin éxito junto a Guillermo la candidatura del Reino Unido para organizar el Mundial de 2018, y su esposa Victoria, Guy Ritchie, el ex marido de Madonna, o el actor británico Rowan Atkinson, más conocido como “Mr Bean”.
Están igualmente invitados otros 200 miembros del mundo de la política, como el primer ministro David Cameron, y todos los embajadores acreditados en la capital excepto el de Libia, según un portavoz del Foreign Office.
La lista no incluye sin embargo a los mandatarios de los países aliados como el de Estados Unidos Barack Obama. “Al no ser el heredero del trono, Guillermo no estaba obligado a invitarlo”, señaló Jobson.
Pero no todos participarán de la misma manera en este día de celebraciones: de los 1.900 invitados a la abadía, sólo 650 asistirán a la recepción del mediodía en el palacio de Buckingham, y el grupo se reducirá a los 300 más íntimos para la cena de gala.
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Invitados a la boda real, una mezcla ecléctica a semejanza de la pareja
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