Reinas compartieron con los niños de Children International

Cuando se trata de ahorrar las candidatas del Concurso Nacional de Belleza (CNB), parecen ser las más expertas. A punta de monedita de 500 pesos han logrado, viajar, divertirse, estudiar y hasta salir de apuros.
Pero no solo ahorran dinero, también economizan aguan, energía y todo aquello que les produzca un gasto adicional.
Desde hace varios años la Señorita Magdalena ahorra el 30 por ciento de su sueldo para estudiar una maestría y gracias a esa disciplina ya lleva la mitad ahorrada.
Más de una vez la Señorita Sucre se ha ido de vacaciones financiada por sus ahorros. En cambio a la Señorita Nariño sus ahorros le han servido para salir de apuros, y aunque confiesa que siempre lo había hecho para tener algo guardado, ahora que vive sola lo hace como parte de sus responsabilidades. “Tengo un chancho que lleno con cuanta moneda de 500 pesos me encuentro y es como una bendición en los momentos de crisis”, dice. Pero no solo ahorra plata, también agua y energía, pues cree que de esa forma también se bajan los gastos.
Y cuando se ahorra con disciplina se pueden obtener muchos beneficios, y si no que lo diga la Señorita Boyacá que en cuatro meses logró ahorrar 600 mil pesos, con monedas de 500 pesos. 
Entonces quienes más que las representantes de la belleza colombiana para darle los mejores consejos sobre el tema, a los niños de la Fundación Children Interntional a los que visitaron ayer, en la sede del barrio Santa Rita.
Allí la entidad sin ánimo de lucro lanzó el programa Aflatoun, con el que pretende despertar en los niños la exploración personal, derechos y responsabilidades, ahorro y gastos, planeación y presupuesto y emprendimiento social y financiero.
Las candidatas le entregaron a los niños una alcancía y consejos para que empiecen a guardar la platica.
Además de dinero, la Señorita Nariño, les aconsejó  sobre el consumo racional de los recursos derivados de la naturaleza como el agua, la energía, el gas y combustible. “Muchos de los recursos naturales no son renovables por lo que hay que cuidarlos y la mejor forma es gastando solo lo necesario”. 
De la mano de los niños de la fundación las beldades desfilaron por la calle sin pavimentar que conduce a la sede. Allí la directora de la fundación, Nidia Monterrosa las esperaba junto a jóvenes y adultos, para que recorrieran la sede que presta servicios médicos a los 4.000 niños apadrinados, en su mayoría por extranjeros.