La noche del miércoles, a las 9:30, tres balazos convirtieron al vigilante Nerser Luna Meléndez en la primera víctima de sicariato en mayo en Cartagena.
Luna Meléndez, de 33 años, estaba en el parqueadero donde trabajaba en el barrio Bellavista, cuando apareció un sicario y le disparó a quemarropa.
El vigilante tenía 3 horas de haber comenzado su turno en el parqueadero. Se supo que dos sujetos en una motocicleta negra llegaron al lugar y tocaron el timbre.
Al pensar que era un cliente que iba a guardar su vehículo, Luna Meléndez se apresuró a abrir la puerta principal.
Al hacerlo, el individuo que iba de parrillero se bajó y le disparó en cinco oportunidades con un revólver calibre 38.
La víctima recibió varios disparos en el pecho. Otro proyectil se alojó en su cabeza. Luna Meléndez murió en el acto, reportan las autoridades.
Una vez cumplido su cometido, el victimario corrió hacia la moto y con su cómplice escapó por una de las calles del barrio Bellavista.
Los asesinos huyeron hacia el barrio 20 de Julio, donde la Policía les perdió la pista pese a que había activado la estrategia del “Plan Candado”.
Los familiares de la víctima se enteraron de lo ocurrido por medio de un vecino.
“Iba camino a llevarle la comida como todas las noches, cuando me encontré con el vecino y me contó que a Nerser lo habían matado”, dice Marcial Luna, hermano de la víctima.
El familiar añadió que al momento de los hechos, un amigo de Luna Meléndez, que también trabaja en el parqueadero se encontraba en el sitio, pero corrió al escuchar el primer disparo.
“Lo que él nos dijo fue que tocaron el timbre y cuando mi hermano abrió enseguida escuchó el primer disparo. Él corrió para salvar su vida. No sabe nada más”, asegura Marcial Luna.
SIN AMENAZAS
Familiares del vigilante aseguran que no tenía amenazas ni enemigos. Tampoco antecedentes penales.
“Él era un hombre sin problemas, siempre andaba tranquilo e iba a todas partes. No creemos que una persona que supiera que lo iban a matar le diera tanta ‘papaya’ al asesino. No sabemos por qué lo mataron, estamos desconcertados con lo ocurrido”, dijo un allegado de Luna Meléndez.
Los familiares descartan que el crimen se relaciona con un problema que la víctima tuvo hace algún tiempo en el Mercado de Bazurto.
“Él vendía agua en el Mercado y tuvo una pelea con otro tipo que le dio varias puñaladas y casi lo mata, pero eso fue hace mucho, así que no creemos que tenga algo que ver”, dice un allegado a Luna.
La víctima tenía 9 años trabajando en el parqueadero donde lo asesinaron. Residía con su esposa y sus dos hijos en el sector Ricaurte del barrio Olaya Herrera.
SIN PISTAS
La Policía Metropolitana de Cartagena inició las investigaciones para esclarecer este crimen, pero aún no hay pistas sobre los asesinos.
Las autoridades no descartan que el sicario se haya equivocado de persona.
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