Buseta embiste a motociclista y choca contra taxi: 5 heridos

“Mijo, lo que Dios quiera”. Eso le dijo a Wilfrido Díaz uno de los pasajeros que llevaba en su taxi “zapatico” hacia El Nazareno. El golpe era inminente. Díaz también lo sabía y por eso se puso a rezar. Él asegura que le “tocó esperar” el golpe porque con la velocidad que iba la buseta no le daba tiempo de hacer alguna maniobra. Y así fue. La buseta de la ruta Caracoles-Centro, de la empresa Cootransurb y de placas UAL-377, se les fue encima tras invadirle el carril y embestir a un motociclista. El taxi, de placas UAR-246, fue el único que pudo frenar la buseta que iba del sector La Castellana hacia el Centro. El impacto hizo temer lo peor. Parte de la defensa del automóvil quedó debajo del chasis de la buseta. El primero en salir fue Wilfrido, pero sus gritos alertaron a quienes llegaban por montón al cruce de la Avenida Pedro de Heredia hacia Las Gaviotas, cerca del puente. El taxista dice que lo se le ocurrió fue pedir ayuda para los dos ancianos que iban entre sus pasajeros. La Policía no tardó en llegar y puso en alerta a los bomberos. Dos ambulancias también acudieron al lugar. Luego de 10 minutos de tensión entre los curiosos por saber qué pasó con Luis Felipe Aguirre Carrascal y Concepción Narváez Correa, ambos de 70 años, los paramédicos y los bomberos los pudieron sacar del taxi. Los dos resultaron con golpes en la cabeza y fueron trasladados de inmediato a un centro asistencial. Los otros dos ocupantes del taxi, allegados de los ancianos, recibieron contusiones leves, pero igual los llevaron a una clínica. El más grave de los cinco heridos es el motociclista que fue arrollado por la buseta antes del choque con el “zapatico”. Manuel Romero, quien iba en una moto Yamaha BWS, de color azul y placa LGE-98B, se recupera en la Clínica Madre Bernarda. Wilfrido Díaz recogió a sus cuatro pasajeros en una iglesia cristiana que está a un costado de la Avenida Pedro de Heredia, frente al puente del Mercado de Bazurto. Asegura que está vivo porque “Dios es grande”. “Ya el semáforo tenía la luz verde para seguir hacia La Castellana, pero todos vimos que la buseta venía muy duro y lo que hice fue esperar el golpe. Creo la buseta llevaba como 80 kilómetros por hora. A mi no me dio tiempo de hacer nada. De milagro estamos todos vivos”, relata Wilfrido Díaz. Doble imprudencia La versión de los testigos y del conductor del taxi coinciden. Todos aseguran que la buseta iba a alta velocidad y se “voló” dos semáforos. “Estos tipos son unos bárbaros, primero se ‘vuela’ el semáforo de Las Gaviotas y se lleva al motociclista que va saliendo del barrio para coger hacia el Centro. “Como trató de esquivarlo, se va al otro carril, cruza el otro semáforo y choca contra el taxi que está en su carril esperando el cambio de luces. No hay muertos porque tuvo que ser así, pero esto tiene que tener control”, contó un testigo que también iba en su moto cuando se encontró de frente con el accidente. Según información entregada por el DATT, el conductor de la buseta de Cootransurb es Jair Roberto Pérez Valdelamar. Un funcionario de ese organismo le confirmó a El Universal que no quedó retenido porque las lesiones de las víctimas no son de gravedad. Oficialmente, dice al agente de tránsito, son por ahora los testigos quienes lo responsabilizan directamente del accidente.