Cae el terror del sur de Bolívar

Su nombre, según la Policía, es sinónimo de asesinatos, amenazas y desplazamiento forzado.
Henry Atencio Rodríguez, alias José, infundía terror en varios municipios del sur de Bolívar, en especial en Río Viejo, donde se sentía con mayor fuerza su accionar delincuencial. La Policía lo señala como uno de los cabecillas de la banda delincuencial Los Urabeños, en el sur del Departamento. Alias José, dicen las autoridades, era el encargado de coordinar los asesinatos selectivos, las extorsiones y el reclutamientos de jóvenes para engrosar las filas de esa banda criminal. El delincuente, de 38 años, y oriundo de Arboletes (Antioquia) logró escapar, hace un mes, de dos operativos desplegados por la Sijín para capturarlo.  
Pero ayer, no corrió con la misma suerte. Alias José fue aprehendido por la Policía en el municipio de Río Viejo. Una llamada de la red de cooperantes entregó la ubicación exacta del sujeto, que estaba escondido porque sabía que la Fuerza Pública “le estaba respirando en la nuca”.
Henry Atencio fue presentado ante un juez de Control de Garantías, en Aguachica (Cesar), que lo aseguró por el delito de concierto para delinquir agravado.
Según las autoridades, su captura servirá para imputarle cargos por el delito de homicidio agravado, ya que hombres que estaban bajo su mando, están dispuestos a colaborar con las autoridades. La Policía está tras la pista de alias Bruno, jefe militar de Los Urabeños, que se presume abandonó Río Viejo ayer, por la ofensiva de la Policía.
Desplazamiento y muerte
En lo que va del año, cinco personas han sido asesinadas en el municipio de Río Viejo.
Alirio Rodríguez, de 26 años; Alfonso Sabala Torres, de 17; Abraham Contreras, de 61, y Carlos Gómez Jiménez, de 37, son algunas de las víctimas.
Estos asesinatos provocaron que en julio pasado 11 familias de las veredas de Cobadillo y Hatillo huyeran hacia la cabecera municipal de Río Viejo, y a los departamentos Cesar y Santander.
Una concejal del mencionado municipio, que por seguridad reserva su nombre, asegura que tuvo que desplazarse por las amenazas de muerte que hizo en su contra alias José.
La concejal se atrevió a denunciar la presencia de grupos al margen de la ley en los corregimientos de Río Viejo.
Esas denuncias la convirtieron en blanco de los delincuentes, que usan ese municipio como corredor para ingresar maquinaria pesada a las minas de oro, en Norosí, sur de Bolívar.
Con dinero proveniente de la minería ilegal, el narcotráfico y las extorsiones a comerciantes y ganaderos, se financia la banda de Los Urabeños en esta región del país.