Doble homicidio en Turbaco

El ataque estaba advertido y el sector Las Margaritas del barrio Paraíso, en Turbaco, sabían que se aproximaba una tragedia. El lunes, a las 8 de la noche, sujetos armados llegaron al sector y cumplieron la amenaza que supuestamente lanzaron días antes.
Los hombres caminaron hacia un kiosko de palma y dispararon indiscriminadamente contra 10 jóvenes que conversaban en ese lugar. Varios de los muchachos corrieron para salvar sus vidas, pero Isaías Poul Bush Romero, Deiner Manuel Márquez Romero y Wilfrido Martínez Gamarra no tuvieron tiempo de escapar. Los jóvenes de 22, 18 y 24 años, respectivamente, fueron alcanzados por las balas. Los tres quedaron tendidos en el piso del kiosko, mientras que los pistoleros escaparon por una zona enmontada del sector Las Margaritas.

Carrera contra la muerte
Los heridos fueron trasladados en motos al Hospital Local de Turbaco.
Allí los médicos aseguran que Deiner Márquez llegó sin vida. El joven recibió un balazo en la cabeza. Los galenos estabilizaron a Bush Romero y a Martínez Gamarra. Ambos fueron remitidos en ambulancias a las clínicas  Madre Bernarda y Laura Carolina.
Los médicos de la Clínica Madre Bernarda lucharon por salvar a Isaías Bush, pero los tres balazos que recibió en el tórax y el abdomen, le costaron la vida.
Wilfrido Martínez corrió con mejor suerte. El joven, que fue impactado en el cuello y pecho, sobrevivió al ataque. Sin embargo, se supo que su estado es crítico.
“Nos dicen que está grave. No sabemos si podrá recuperarse, esperamos que sí”, afirma un allegado a Martínez.

Sin problemas
Familiares de las tres víctimas coinciden en que los jóvenes no tenían amenazas de muerte ni problemas.Ana Romero Pérez, madre de Deiner Márquez, dice que su hijo salió de su vivienda, en el sector Las Cocás del barrioo Paraíso, a las 7 de la noche del lunes.
“Se fue para el kiosko a hablar con los amigos. Ellos tenían por costumbre estar en ese lugar. Mi hijo era un joven sano. Ahora no estaba trabajando, pero cuando le salía alguna cosa, él lo hacía”, asegura la madre.
Por su parte Eduardo Bush, padre de Isaías Bush, afirmó que muchas veces le pidió al joven que se alejara de las malas amistades.
“Siempre le advertí que no fuera a ese kiosko. Le pedía que se alejara de las amistades peligrosas. Él era un buen muchacho, pero andaba con gente mala. Sé que no llegaron a matar a Isaías, pero por estar allí también pagó”, relata el padre.
Isaías Bush era oriundo de San Andrés Islas, pero tenía muchos años viviendo el barrio Buena vista, en Turbaco.


Dejan panfleto
Los homicidas dejaron un panfleto en el aseguran que comenzó una “limpieza social” en Turbaco. Afirman que asesinaran a jíbaros y amenazan de muerte a siete mototaxistas de ese municipio.