Era la Dian y no delincuentes

Cuatro funcionarios de la Dian llegaron el miércoles en la tarde al edificio Estefanía, en el barrio Castillogrande, y le pidieron al vigilante que los dejara entrar.  El celador les exigió que se identificaran y mostraran la orden para ingresar al inmueble, la cual, dice el empleado del edificio,  no tenían.
El vigilante les negó el ingreso y avisó a la Policía, imaginando que podrían ser delincuentes.
“El señor dio la placa de la camioneta Grand Vitara, de color azul, en la que se fueron las personas. De inmediato se avisó a todas las patrullas para que estuvieran pendientes de la situación y detuvieran el vehículo”, afirma el policía que atendió el caso.
Pero no solo la Policía inició los operativos para encontrar el automotor, cientos de cartageneros en las redes sociales y en el chat de Blackberry, mandaban cadenas con las placas de la camioneta y pedían a quien la viera avisar a las autoridades.
La información de lo ocurrido se filtró porque un joven, que estaba cerca de un uniformado, escuchó cuando el policía daba instrucciones por su radio de comunicaciones.  El joven, que pensó que la camioneta estaba involucrada en un atraco, mandó un mensaje a todos sus amigos para que colaboraran con la búsqueda del automotor. La Policía encontró el vehículo en la mañana de ayer, en Bocagrande. Las autoridades comprobaron que era un vehículo oficial de la Dian y sus cuatro ocupantes, tres hombres y una mujer, trabajan para ese organismo. Los funcionarios aseguraron a la Policía que estuvieron en el edificio Estefanía en cumplimiento de sus funciones.

“Torpedearon el trabajo”
Mercedes De León, directora seccional de Impuestos de Cartagena, aseguró que los funcionarios de la Dian llegaron al inmueble para cumplir un acto administrativo en una sociedad que tiene dirección en el edificio Estefanía.
“Los funcionarios se identificaron con el vigilante y este no les abrió la puerta. Ellos le explicaron lo que iban a hacer y el señor les aseguró que no tenía autorización para que ellos ingresaran. Como no pudieron entrar, se fueron en una camioneta Grand Vitara, color negro, que es un vehículo oficial de la Dian”, asegura la directora.
Según De León, ayer en la mañana, cuando el vehículo fue a recoger a dos funcionarios, quienes se hospedan en un hotel en Bocagrande, fueron detenidos por la Policía.
“Los funcionarios, que  llegaron en una comisión de Bogotá, se identificaron con la Policía y aún así los retuvieron por una hora. Tuvimos que comunicarnos con la Policía Fiscal y Aduanera, que apoya a la Dian, para que intervinieran y los dejaran ir. Esta situación nos preocupa porque torpedearon el trabajo de la Dian. Los funcionarios no tenían que mostrarle el auto comisorio al vigilante del edificio porque es un documento reservado. Él debió llamar a la Dian para confirmar que los funcionarios hacen parte de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales”, asegura Mercedes De León.

¿Paranoia?
La delicada situación de inseguridad en Cartagena propicia episodios como el relatado.
Los delincuentes se hacen pasar como trabajadores de las empresas públicas y de entidades del Estado, para ingresar a edificios y desocupar los apartamentos.
Según Ignacio de Villarreal, presidente de Asobocala, el vigilante del edificio Estefanía actuó como deberían actuar todos y conminó a sus vecinos a denunciar cuando sean víctimas de la delincuencia.
“No hay que quedarse callados. Solo unidos podremos derrotar la inseguridad”, dice.