Delmar Engelberto Arellano Hernández sabía que alguien quería asesinarlo, pero creyó que la sentencia de muerte que le lanzaron hace varios meses quedaría sólo en palabras.El vigilante, de 45 años, estaba equivocado.
El jueves, a las 9:30 de la noche, a Arellano Hernández le cumplieron la amenaza y lo asesinaron de dos balazos en la cabeza cuando iba en su motocicleta por el barrio Santa Lucía.
Sus familiares dicen que a esa hora Delmar Arellano regresaba a la casa de una de sus mujeres, en la urbanización Portal de la Candelaria, luego de trabajar como vigilante en una papelería del Mercado de Bazurto.
Se conoció que Arellano fue interceptado dos sicarios, quienes le dispararon dos veces a la cabeza.
“Él salió del trabajo e iba a dormir donde su otra mujer. Lo que nos dicen es que iba en su moto cuando desde otra, que iba detrás, le dispararon dos veces. Delmar murió enseguida”, dice Doreila Pérez, esposa de la víctima.
Estaba amenazado
Familiares del vigilante coinciden en afirmar que el único problema que tuvo Delmar Arellano fue con un excompañero de trabajo, quien lo amenazó de muerte cuando lo despidieron de la empresa donde trabajaban.
“Delmar era vigilante en la empresa Cotrasur, pero como estaba de vacaciones se fue a la papelería a ganarse una platica. Lo que él me dijo una vez fue que tuvo problemas con un compañero a quien despidieron y éste le dijo que era hombre muerto y se las tenía que pagar”, dice Dorelia Pérez.
Luego de eso, cuenta la mujer, el excompañero llegó a la casa de ella en el sector Primavera del barrio Nelson Mandela, preguntando si allí vivía Delmar Arellano.
“Mi hija fue quien lo atendió y él sólo preguntó por mi marido, cuando ella le contestó él se fue. Al poco tiempo regresaron dos muchachos también preguntando por él y cuando le dije que no estaba, se fueron”, comenta la esposa.
La mujer asegura que cuando habló con su esposo de lo ocurrido, él le dijo que tuvieran mucho cuidado.
“Él no pensó que ese hombre lo iba a asesinar. Me dijo que tuviéramos cuidado pero él siguió con su vida normal, no puso denuncia ni nada porque pensó que iba a quedar en palabras”, sostiene la mujer.
Fue policía
Mari Luz Castillo Blanco, quien también era mujer de Arellano, dijo que éste fue policía durante 13 años, pero hace que fue retirado hace 12 años de esa Institución.
“Delmar fue policía mucho tiempo, pero lo retiraron por un problema que tuvo con un compañero de trabajo. Pero eso fue hace mucho tiempo y no creo que tenga que ver con su muerte”, dice la mujer.
Luego de su retiro, Arellano Hernández se dedicó a trabajar como vigilante.
Hace 5 años empezó a laborar en la empresa Cotrasur.
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