"Estamos sorprendidos por lo que hizo"

La cárcel trastornó a Eliécer Iriarte Torreglosa. De eso están convencidos sus familiares. Lo que ellos no tienen claro es cómo trepó cuatro paredes, desarmó a un guardián y corrió para escapar de la Penitenciaría de Ternera el lunes en la tarde. La familia del recluso dice que se enteró de su muerte por otro preso que los llamó desde un celular. “Los directivos de la cárcel ni siquiera nos han dicho qué sucedió”, comenta Luz Mary, hermana de Eliécer. Eliécer Iriarte siempre vivió con su familia en la calle 7 de Fredonia. Desde joven fue comerciante independiente. Su afán por buscar estabilidad económica lo llevó a ser mayorista de pescados. La vida parecía sonreírle con trabajo y un hijo cuando la tragedia se cruzó en su camino. A mediados de 1991, Iriarte Torreglosa se vio involucrado en una riña callejera en el barrio República de Líbano. Un habitante de ese sector fue asesinado con arma de blanca y los tres involucrados fueron capturados. Dos de ellos eran menores en ese entonces y sólo permanecieron por unos meses en un centro de rehabilitación. Algunos creen que Eliécer no aguantó la presión de estar encerrado más de 11 años y por eso preparó una huida que la frustró un guardián que no falló su tercer disparo.