María* bajaba las escaleras eléctricas del centro comercial La Castellana cuando sintió que dos mujeres, quienes iban detrás de ella, le tocaron el cabello.
Segundos después, la joven se sintió mareada y las dos mujeres, una de ellas embarazada, la tomaron por el brazo. María las llevó a su casa en el barrio San Fernando, donde les entregó sus joyas y dos computadores portátiles.
Después, fueron a un banco donde la joven retiró 600 mil pesos y también se los dio a las mujeres.
“Fuimos nuevamente a La Castellana y la mujer embarazada me mandó a comprarle unas medicinas. Cuando estoy en la farmacia reacciono y salgo corriendo. Un vigilante del centro comercial me auxilió al ver que estaba como loca”, relató María a las autoridades.
La joven fue llevada a la Clínica Blas de Lezo, donde los médicos le aseguraron que era una víctima más de la temida escopolamina, conocida popularmente como burundanga.
María denunció lo ocurrido en la Policía y espera que capturen a las responsables.
El sábado 21 de junio, Carolina* también fue drogada para suprimir su voluntad.
La joven, de 19 años, estaba en el centro comercial La Castellana cuando se le acercaron dos mujeres y le aplicaron una sustancia en el cabello.
“Me empecé a sentir mal y las mujeres se ofrecieron a ayudar. Después fuimos a mi casa y no sé por qué, les entregué más de 1 millón de pesos. Luego de eso me llevaron al centro comercial Ronda Real y allí me dejaron. Yo reaccioné horas después”, contó la víctima.
María y Carolina sufrieron en carne propia los efectos de esa potente y peligrosa droga, que en lo corrido del año ha dejado 10 víctimas en Cartagena.
Sin embargo, se estima que la cifra es mayor ya que muchas víctimas no denuncian.
Que no le pase a usted
*No toque papeles, hojas o volantes de desconocidos en la calle o en su vehículo.
*No acepte ningún tipo de bebida, dulces y cigarrillos de desconocidos.
* No deje su botella o vaso de licor abandonados.
*Tenga cuidado de personas que son aparentemente inofensivas que se le acercan demandando caridad o pidiendole lea una dirección.
*Si en el lapso de un minuto usted sospecha haber sido drogado y está acorralado, simule un desmayo y finja convulsionar. De esta manera asustará al delincuente.
*Si todavía se encuentra semi-consiente y puede distinguir si el delincuente se ha marchado, pida auxilio de inmediato.
*No abra la puerta a supuestos religiosos, vendedores puerta a puerta, empleados de servicios públicos sin previa autorización.
*No acepte pañuelos de extraños con pretexto de que su cara o su ropa están sucios.
*No acepte demostraciones de productos como perfumes.
*Ponga especial atención a las personas que se acerquen en los sitios públicos o ambientes como discotecas o estadios.
*No proporcione a extraños datos que puedan comprometerlo, como dirección de su casa, número de su teléfono fijo o celular.
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