Explosión mató a cuatro miembros de una familia

La muerte le arrebató a Omar Guerra Chávez toda su familia.
Hace 6 años tuvo que sepultar a la mayor de sus 3 hijos, quien se ahogó cuando tenía 7 años.Hoy, Guerra Chávez prepara el funeral de su esposa Zoila Rosa Ojeda Miranda, sus dos hijos Jesús Guerra y Omar Enrique Guerra; al igual que el de su suegro Armando Ojeda, quienes murieron en una explosión de un laboratorio químico donde se guardaba pólvora, al parecer de manera ilegal, el cual quedaba contiguo a la casa de la familia, en la avenida Diego Carvajal del municipio de Magangué (Bolívar).
“Omar está destruido. Le dio muy duro tener que sepultar a su hija tan pequeña y aún no lo había superado, para que ahora tenga que sepultar a los dos niños que eran la luz de su vida”, dijo Eraclio Cordero, familiar de las víctimas.
La tragedia ocurrió a las 5:40 de la madrugada de ayer.
La fuerte explosión seguida de un incendio consumió en minutos el laboratorio químico y la casa de la familia Ojeda, quienes dormían cuando ocurrió el hecho.
La onda explosiva causó daños materiales en otras 4 viviendas, ubicadas cerca del lugar.
“Lo que nos han dicho es que la explosión ocurrió dentro del laboratorio y como la casa está al lado, fue la que más sufrió. La explosión tumbó las paredes y el incendio acabó con lo que quedaba. Zoila y los niños no tuvieron tiempo de salir”, dijo Eraclio Cordero.
Según las autoridades, los bomberos demoraron 2 horas apagando las llamas, y sólo hasta ese momento, se pudo entrar a rescatar los cuerpos de las 4 víctimas, los cuales quedaron bajo los escombros.
Milagrosamente, dos hombres que vivían en un apartamento en el segundo piso de la vivienda, se salvaron de morir al lanzarse al vacío. Ninguno sufrió heridas de consideración.
Las causas
Las autoridades manejan dos hipótesis sobre las causas de la tragedia.
La primera de ella apunta a una concentración de gases dentro del laboratorio químico Duar EU, donde ocurrió la explosión. La otra, dicen, pudo ser por un cortocircuito.
Cualquiera de las dos, creen las autoridades, se convirtió en un problema de gran magnitud por la pólvora que se guardaba en la bodega del laboratorio.
Según el coronel Hugo Casas, comandante de la Policía de Bolívar, el laboratorio no tenía los permisos requeridos para expender o almacenar pólvora.
“Es un hecho lamentable y estamos investigando las razones por las cuales se tenía pólvora en ese lugar. Por lo pronto se acordó hacer mayores controles para evitar que tragedias como éstas vuelvan a ocurrir en la municipalidad”, dice Casas.
Habla el Alcalde
Arcesio Pérez, alcalde de Magangué, dijo, al término de un consejo de seguridad, que el laboratorio químico propiedad de Canaan Cure, no tenía permiso para expender pólvora, pero éste explicó que la tenía en ese lugar porque fue una mercancía que no pudo vender en diciembre.
“Lo que Canaan explica es que durante diciembre no pudo expender la pólvora que había comprado, y la tenía almacenada en el laboratorio esperando que los distribuidores la recogieran. Lo que sigue de aquí en adelante es recoger e incautar toda la pólvora que se esté distribuyendo en el municipio. No queremos tener que volver a vivir una situación similar en el futuro”, dijo Pérez.
Las víctimas
Zoila Rosa Ojeda Miranda, de 33 años, era oriunda del corregimiento de  Palenquitos, jurisdicción del municipio de Pinillos (Bolívar).
La mujer, quien estaba casada con Omar Guerra, se fue con sus hijos a vivir a Magangué, luego que a su esposo, quien es maestro, lo trasladaran a Sincé (Sucre).
Ojeda Miranda tenía aproximadamente 5 años, de estar viviendo con sus dos hijos en Magangué.
“Ellos antes vivían en Palenquitos, pero como trasladaron a Omar, decidieron irse a un lugar que quedara a mitad de camino, para que él pudiera visitarlos a menudo”, dijo un familiar.
Armando Ojeda Cordero, de 72 años, estaba acompañando a su hija ante la ausencia de su esposo.
El anciano había pasado año nuevo en Palenquito, y hace dos semanas regresó a Magangué a realizarse chequeos médicos y a pasar tiempo con sus nietos.
Omar Enrique Ojeda Guerra, de 14 años, estaba estudiando bachillerato. Su hermano Jesús Guerra Ojeda, de 4, hacía preescolar.
Ambos se preparaban para entrar a clases en los próximos días.
Se conoció que los cuerpos de los dos menores serán sepultados en Sincé, mientras que el de Soila Ojeda y el de su padre serán llevados a Palenquitos.