Fue al sepelio de su amigo y lo matan al regresar a su casa

¿Extraña coincidencia? ¿Muertes relacionadas?, ¿Robo? ¿Riña? Son muchos los interrogantes que se hacen los habitantes de la carrera 92, en Villa Estrella, para encontrar una explicación al crimen de Gerardo Albeiro Serna Herrera. El taxista, de 23 años, fue asesinado el miércoles, a las 11:45 de la noche, luego de asistir al sepelio de su vecino Fajith Tobías Quintana, quien un día antes se electrocutó en la vivienda de Gerardo al tocar un cable de alta tensión con la cabeza. Familiares de las víctimas aseguran que ambos eran grandes amigos y compartían la misma pasión por el equipo de fútbol de su tierra, Real Cartagena. Todos reconocen que Serna Herrera fue uno de los que más lloró la muerte de Fajith, quien residía frente a su vivienda. Con una tambora, una camiseta del Real y cánticos del club, hizo parte de la barra que acompañó el miércoles en la tarde a Fajith a su última morada, en el Cementerio Jardines de Cartagena, en la vía a Turbaco. Lo que ocurrió después con él nadie se atreve a asegurarlo. En la carrera 92, del sector Prado Nacional, ninguno de sus habitantes quiere relacionar ambos hechos. Los parientes de los dos jóvenes dicen que la palabra “venganza” no existe en la mente de quienes conocían a Fajith y a Gerardo. La captura de dos sospechosos por parte de la Policía minutos después del homicidio deja entrever, sin embargo, que alguien “conocido” degolló al taxista. Fue a comprar cervezas Antes de ser sepultado, sus amigos de barriada le rindieron a Fajith un homenaje frente a la vivienda de Gerardo. En esa casa, en la azotea del segundo piso, el joven medía dónde poner unos ladrillos para luego pintar cuando encontró la muerte. El hecho ocurrió a las 9 de la mañana del martes. El cortejo fúnebre salió de Villa Estrella a las 3 p.m del miércoles. Los asistentes regresaron al barrio en la noche. Gerardo, cuentan sus familiares, fue uno de los que se quedó tomando con sus amigos y con los allegados de Fajith cerca del velorio. A las 11:30 p.m., el taxista y un amigo de nombre Arturo salieron a comprar cervezas en una tienda de la otra calle. Antes de llegar, relata este último, dos hombres se le cruzaron en el camino y los atacaron. Arturo pudo defenderse y sólo fue golpeado. La suerte no fue igual para Gerardo. Fue acuchillado en la cabeza, cuello y un hombro. Su familia dice que le robaron unos zapatos deportivos marca Puma, avaluados en 250 mil pesos. Los agresores huyeron hacia el sector San Nicolás y Arturo se regresó por ayuda al velorio. Serna Herrera fue trasladado a la Clínica Madre Bernardo, pero falleció en el taxi. La Policía hizo un “barrido” en Villa Estrella y poco después de la medianoche capturó a dos sospechosos en una moto. Según allegados de la víctima, esos individuos sabrían quiénes asesinaron a Gerardo Albeiro. Mientras las autoridades esclarecen el crimen del taxista, en la carrera 92 se preparan para darle el último adiós al segundo habitante de ese sector en menos de 48 horas.