Hieren a mujer de 61 años en pelea por $500

Nancy María Martínez Navarro era ajena a lo que sucedía pero una discusión por 500 pesos la tiene hoy bajo observación médica en el Hospital Universitario del Caribe. La mujer, de 61 años, recibió un balazo en el pecho mientras atendía una venta de sopa en la puerta de su casa, en la calle Pablo Emilio Bustamante, en el barrio La Esperanza. El hecho ocurrió ayer al mediodía, poco antes que lloviera en la ciudad. El agresor, un vecino de la víctima, huye pero está plenamente identificado por la Policía. El individuo, de unos 35 años y oriundo de Turbo –Antioquia-, corrió hacia el sector El Hoyo. Un yerno de Nancy y otros familiares lo persiguieron varias cuadras pero le perdieron el rastro en una zona fangosa cercana a la Vía Perimetral. El último reporte médico, conocido por sus familiares al caer la tarde, indica que el estado de salud de Nancy es estable. “Le tomaron una última placa para ver si la operan pero hasta el momento está bien, no ha perdido el conocimiento y ha respondido bien el tratamiento. La bala le entró por el pecho, le salió y le rozó un brazo”, cuenta una hija de la cocinera. Por reclamar un vuelto Nancy Peña nació en Barrancanbermeja pero tiene años vendiendo sopa en La Esperanza. No en vano su negocio es de los más visitados todos los días en la calle Pablo Emilio Bustamante. Ayer no fue la excepción. Los clientes disfrutaban su almuerzo y ella meneaba la olla cuando se originó una discusión por 500 pesos. La pelea era entre una mujer y un allegado de Nancy. La cliente, quien reside en ese mismo barrio, reclamaba que le devolvieran dinero por recibir la cantidad de sopa que no esperaba. El pariente de Nancy le dijo que no le iba a regresar plata y que no había más nada que hablar. La mujer se fue pero regresó a los pocos minutos con su marido. Este último increpó al hombre que discutió con su mujer y pasó de las palabras a los puños. En medio del altercado, cuentan los familiares de la víctima, el marido de la cliente sacó un revólver y le disparó a su rival. El proyectil rebotó en el piso y se alojó en el pecho de Nancy. “El tipo no le iba a dar a mi mamá. Al ver lo que había hecho, se desesperó y se fue corriendo. Mis hermanos y varios vecinos lo persiguieron pero no lo alcanzaron”, relata la hija de Nancy. La cocinera fue trasladada inicialmente en una moto al CAP de La Candelaria. Ante lo delicado de su estado de salud, los médicos la remitieron de inmediato a la sala de urgencias del Universitario. La Policía se puso al frente del caso para dar captura al agresor. Los funcionarios de la Sijín tienen en su poder una fotografía suya. Ni el hecho de sangre ni la lluvia no impidió que se siguiera vendiendo almuerzos en casa de Nancy Martínez.