Investigan homicidio de minusválido

Renix Puello Parra dormía profundamente en su cama cuando un desconocido entró a su vivienda, caminó hasta su cuarto y cuando lo tuvo al frente le dio dos balazos. Uno en el ojo izquierdo y el otro en el cuello. El hecho ocurrió ayer, al mediodía.
Los disparos desataron la curiosidad de los vecinos de la calle Las Flores del sector La Magdalena, en Olaya Herrera, que de inmediato salieron a ver qué pasaba en la casa de Renix Puello, un minusválido de 37 años, popularmente conocido en la zona como ‘Papa Renix’.
El sicario guardó su arma y salió de la vivienda caminando después de cometer su fechoría. Subió en una moto pulsar, de color blanco, que estaba parqueada frente a la vivienda, en la que lo esperaba su compinche.
El sujeto causó sospechas y uno de los habitantes del lugar entró a la casa para ver qué había pasado. Al llegar al cuarto de Renix, lo encontró agonizando. El hombre empezó a gritar pidiendo ayuda y luego otros vecinos llegaron a la casa.
Cargaron al herido entre varios y lo llevaron a pie, por unas cuatro cuadras, hasta la Avenida Pedro Romero. Lo subieron a un taxi y llevaron a la Clínica Madre Bernarda.
Allí lo intervinieron de emergencia, pero los proyectiles que recibió fueron certeros y terminaron consumando las intensiones oscuras de su verdugo. Murió a la 1:30 de la tarde de ayer, una hora y media después que lo hirieran. La Policía
La segunda y la vencida
Allegados a Puello Parra, quien deja dos hijos, cuentan que tenía más de 15 años de estar en una silla de ruedas, desde que recibió un balazo en la espalda, en el Mercado de Bazurto. Dicen que estuvo grave, pero logró sobreponerse a la situación.
Conocidos explican que le fue difícil el proceso de recuperación, pero logró salir adelante y montó un negocio de rifas. Salía a venderlas por las calles de Olaya y últimamente tenía a dos jóvenes que le ayudaban con la venta de las boletas.
“Hace casi dos meses murió una hermana y luego una tía, que era la que lo cuidaba. Desde entonces él se puso mal y lo hospitalizaron. Hace poco regresó a casa y unas enfermeras llegaban a atenderlo, casi todos los días”, relata un allegado al hombre.
Ayer, Renix Puello estaba en casa, junto a su hermana. Ella dormía en un cuarto y él en otro, cuando llegó el sicario y lo baleó. Luego que al herido lo llevaran al hospital llegó a la vivienda Betilda Parra Vergara, mamá del minusválido. La mujer llegó llorando y luego se fue para la Clínica Madre Bernarda, donde luego falleció su hijo.