Le dan 11 años de cárcel por matar a su compadre

Nadie duda en señalar que fue el alcohol el responsable de la tragedia que ocurrió el 21 de septiembre del 2008 en el sector 13, en el barrio Policarpa. Ese día, paradójicamente celebración de Amor y Amistad, Luis Miguel Porras Herrera asesinó a su compadre Oswaldo Licona Meza porque éste le golpeó el sillón de la moto mientras discutía con su mujer, Nayidis Cabrera Fuentes. Eran las 3 de la madrugada cuando Licona Meza regresó borracho a su vivienda. Al no encontrar a su compañera, se fue a la casa de su compadre y allí la encontró tomando. Tras pedirle que saliera varias veces, Oswaldo golpeó con rabia la moto que estaba en la puerta de la casa de Porras Herrera. La reacción de éste, quien también estaba bastante embriagado, no se hizo esperar. Sus hijos intentaron mediar en la discusión, pero uno de ellos alcanzó a agredir a Licona. Nayidis recuerda que agarró a su marido y evitó por unos minutos que no le hicieran daño. “Yo les grité a ambos que no se hicieran daño, pero mi compadre se armó, primero de un machete, y luego de un cuchillo. “Yo evité hasta cuando mi marido se me soltó porque me dieron una cuchillada en la frente. Cuando me di cuenta para ver dónde estaba Oswaldo, lo vi tirado en el piso”, recuerda Nayidis, viuda de Licona Meza. La víctima, de 39 años y natural de Tolú (Sucre), fue atacada en la cabeza, un brazo y el abdomen. Murió en el acto. Su cadáver quedó frente a la vivienda de su victimario. Luis Miguel Porras, de 41 años y de ocupación operador de máquinas pesada, escapó hacia Membrillal. Horas des-pués se entregó en la Estación de Policía en Pasacaballos. Esta semana, el Juez Cuarto Penal del Circuito de Cartagena lo ha encontrado culpable del delito de homicidio y lo condenó a 11 años de cárcel. Porras Herrera purga la pena en la Penitenciaría de Ternera.