Lo citan para asesinarlo

De nada le sirvieron a Eduardo Berrío Sepúlveda las dos aseguranzas que cargaba en sus bolsillos para que lo protegieran del peligro.
El hombre, de 46 años, fue sorprendido por un sicario que le pegó cinco balazos.
El homicidio ocurrió a las 7:10 de la mañana, frente al almacén Olímpica de Los Ejecutivos. A escasos 200 metros de un CAI de la Policía.
Testigos aseguran que Berrío Sepúlveda se acababa de bajar de una mototaxi cuando fue interceptado por su asesino. Dicen que el sicario se bajó de una moto y disparó a su víctima por la espalda. Al caer al piso, el homicida la remató de cuatro balazos en la cabeza.
El asesino regresó a la moto, de placa  EFR 71C, donde lo esperaba su cómplice, y huyeron rumbo a la avenida El Consulado.
Se conoció que un hombre, de 62 años, resultó herido y fue trasladado a la Clínica Blas de Lezo. La Policía no reportó la captura de los responsables del crimen.
Salió a pagar un recibo
Familiares de Eduardo Berrío aseguran que este salió de su casa, en el barrio Chapacuá, a las 6:30 de la mañana de ayer. Le dijo a su esposa que iba a pagar el recibo del servicio de agua, ya que no había podido hacerlo el día anterior.
“Se levantó temprano y me dijo que iba a ir a hacer el pago. Salió de la casa y a los 20 minutos vino el mototaxista que le hizo la carrera a avisarnos que lo habían matado”, cuenta la esposa de la víctima.
Al parecer, antes de abandonar su vivienda Berrío Sepúlveda recibió una llamada a su celular, en la que presuntamente le pusieron una cita.
Los allegados a la víctima desconocen quién lo llamó o qué le dijeron. Lo cierto es que creen que salió a cumplirla.
“Nosotros no sabemos por qué lo mataron. Él nunca comentó que tuviera problemas o enemigos. Tampoco hablaba mucho de sus negocios”, añade la esposa de  la víctima.
Según la mujer, Berrío se ganaba la vida como comerciante. Asegura que vendía mercancía de acuerdo a la época del año. En la actualidad, dice, comercializaba latas de espuma.
Capturado por hurto
Según la Policía, Berrío Sepúlveda tenía antecedentes pro el delito de hurto.
Supuestamente, fue capturado en 1999 por el robo a un banco. Cuatro años más tarde, en el 2003, fue retenido por un robo. En el 2004 cayó nuevamente en manos de la Policía al ser supuestamente sorprendido cometiendo un delito.
Las autoridades investigan si en la actualidad estaría involucrado con algún ilícito.