¿Los mataron por un gallo?

Alexander Herazo Martínez era un curtido gallero que no soportaba ver perder a sus gallos en la valla (redondel donde pelean). Hace un par de días uno de sus animales murió en una contienda.Molesto por lo ocurrido, el hombre, de 35 años, habría matado al gallo de su contrincante.
Ese hecho presuntamente desencadenó el brutal asesinato de Alexander Herazo y de su mujer Sandra Díaz Huertas. La pareja fue hallada sin vida ayer, en la Finca Doña Blanca, en el municipio de Turbaco.
Ambos fueron asesinados a machetazos. El cuerpo del gallero lo encontraron en la puerta de la finca. Tenía mortales heridas en la cabeza.
Sandra Díaz, de 25 años, estaba en la sala de la casa. La joven recibió tres machetazos en la cabeza, tórax y cuello.
La hija de la pareja, de 1 año, es la única sobreviviente. A la bebé la encontraron dormida en una de las habitaciones de la vivienda.
La niña quedó en manos del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar.

De frente con la muerte
Un vecino de la pareja descubrió los cuerpos  a las 6 de la mañana de ayer.
Horrorizado al ver el cuerpo de Herazo Martínez en un charco de sangre, corrió a avisar a las autoridades sobre el macabro hallazgo.
El vecino llegó a un batallón de Infantería de Marina y de inmediato varios uniformados se dirigieron a la Finca Doña Blanca.
“Cuando empezó a correr la bola sobre los muertos, salí a ver si era cierto. Vimos a Alex tirado en la entrada de la finca, como que lo atacaron cuando estaba abriendo la puerta. A la muchacha no la vimos porque estaba dentro de la casa”, dijo un vecino de la pareja.
Las autoridades presumen que el crimen se cometió a la 1 de la madrugada de ayer.
Supuestamente el o  los asesinos entraron a la finca aprovechando la oscuridad. Allí habrían maniatado a Sandra Díaz y luego la atacaron con machete.
Lo que sucedió después se desconoce, lo cierto es que los homicidas arremetieron contra el gallero cuando este llegaba a Doña Blanca en su moto.

“No tenía problemas”
Alexander Herazo llegó a Cartagena hace 4 años procedente del corregimiento de Lorica, jurisdicción de Córdoba.
Un allegado lo recomendó para que trabajara en la finca donde lo asesinaron.
Herazo, padre de dos hijos, cuidaba el predio y criaba gallos de pelea, su gran pasión.
Familiares del gallero aseguran que no le conocían problemas ni enemigos.
“Hace poco hablamos con él y no manifestó tener problemas. Nosotros nos enteramos de su muerte porque nos llamaron de Córdoba a decirnos. No sabemos quién avisó allá. Esperamos que las investigaciones digan qué pasó”, comentó una tía de la víctima.
Sobre Sandra Díaz, se conoció que era oriunda de Turbaco y residía en el barrio La Línea.
La joven pasaba los fines de semana con su marido y su hija en la finca donde los asesinaron.
Los familiares de Díaz no quisieron entregar declaraciones a la prensa.