"Mi papá me decía que era normal tener relaciones con él"

En medio de la angustia y la incertidumbre se debate Martha Isabel, la joven que acusó a su padre de abusar sexualmente de ella durante más de trece años. Sus días transcurren en medio del llanto, escondida en la casa de una amiga en el municipio de Yotoco. Allí se pasa todo el día pensando en sus seis, supuestamente también hijos de su padre, que están en manos del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar. "Ella no se atreve a salir aún a la calle, pues siente vergüenza de lo que le ha pasado", dijo Nelsy Ríos, una funcionaria de la Comisaría de Familia de este municipio. Su padre, Álvaro Rondón, de 53 años, quien es conocido como "el mosntruo de Buga", fue trasladado este jueves a la cárcel del Distrito Judicial de esa ciudad, acusado de los delitos de incesto y acceso carnal agravado. Para Martha Isabel es difícil hablar. Cada vez que recuerda el drama que vivió durante varios años al lado de su progenitor, quien después se convirtió en el padre sus vástagos, se le hace un nudo en la garganta. "Hablar de eso es algo muy difícil", dijo la mujer, de 26 años, quien manifestó que su papá empezó los abusos cuando ella era apenas una niña de 9 años. Cuatro años después, este hombre se divorció de su mamá y la convirtió en su mujer. "Él decía que eso era normal, que no era la primera mujer que se acostaba con su papá", dijo. Ella recuerda con amargura como su padre no le permitía relacionarse con las demás personas ni que tener amigos. "Durante siete años me tuvo encerrada en una finca en el corregimiento de La Habana, en Buga. Él se encargaba de llevar la comida para los niños y no me permitía que bajara al pueblo". Y agregó "yo le decía a mi papá, y ahora qué van a pensar mi mamá y mis hermanos y él decía que para que me preocupaba por eso, pues si lo dejaba me iba a morir de hambre". Martha Isabel está convencida que su padre le destruyó la vida. Ahora se pregunta por qué no lo denunció ante las autoridades. INVESTIGACIÓN DEL ICBF El Comisario de Familia de Yotoco, Guillermo León Rojas Ocampo, dijo que el hombre tenía a sus seis hijos-nietos y a su hija-esposa viviendo en un rancho en el corregimiento de Mediacanoa en condiciones de extrema pobreza. Cuando el Icbf le indagó a la joven por el padre de sus seis hijos, ella dijo que estaba en Cali y que cada mes le enviaba una mesada de $300.000. El pasado 25 de febrero se expidió una resolución donde se ordena separar a los niños de su madre durante los próximos cinco meses, como una medida de protección. El Icbf determinará la suerte de los menores, si se entregan en adopción o se reintegran a su familia. RECUADRO CON INFORMACIÓN DEL ICBF El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Icbf, informó este viernes que los niños y niñas producto del incesto se encuentran en proceso de recuperación nutricional y reciben apoyo psicosocial por parte de profesionales vinculados a la entidad. A la vez se están adelantando los trámites pertinentes para vincularlos a los sistemas de salud y educación, como también están bajo el especial cuidado de una madre sustituta y de varios expertos en atención al menor. Desde el Centro Zonal de Buga, Valle del Cauca, el Icbf inició las investigaciones una vez denunciado el caso y durante la visita de verificación detectó la situación de incesto e instauró la denuncia ante la Fiscalía. En el mismo comunicado, el Instituto Colombiano informó que la Comisaria de Familia de Yotoco es la responsable de adelantar las actuaciones administrativas para definir la situación de los menores.