Muere en ataque de pandilla

Una y otra vez el domingo en la noche Jennis Blanco le dijo a su hijo, Yonander Enrique Pérez Blanco, que no asistiera a un quinceañero en el callejón Bolívar, en La Esperanza.
Pandilleros de La Candelaria habían amenazado con meterse a la casa donde se llevó a cabo el festejo, si no les daban dos botellas de licor. Pese a todas las advertencias de su madre, Yonander decidió no hacerle caso y a las 8:30 de la noche de ese mismo día salió de su casa, en el sector Puerto Pescador, en La esperanza, rumbo a la fiesta.
A las 11:30 de la noche, la mala hora fue por él. Sus parientes dicen que a esa hora más de 20 integrantes de la pandilla ‘Los Chacaritas’, entre los que estaban adolescentes de 12 años, irrumpieron en el lugar y atacaron a los presentes con piedras.
Yonander, de 19 años, llevó la peor parte. Su familia dice que alias ‘el Chacarita’, a quien señalan como el líder de la pandilla y a quien acompañaba alias ‘el Papote’, le dio un balazo en el pecho que marcó su destino con sangre.
Malherido, lo llevaron al CAP de La Candelaria. El balazo fue letal y allí falleció minutos después.
Quieren justicia
Pérez Blanco nació en Caracas, Venezuela. Cuando tenía solo un año su mamá se lo trajo a Cartagena.
Jennis dice que le compró dos motos con las que trabajaba como mototaxista. “Ayer- domingo- en la noche, llegaron vecinos a mi casa avisándome que en la fiesta que estaba mi hijo se habían metido varios pandilleros de La Candelaria. Yo me vestí y me fui corriendo para el sitio. Mientras iba llegando escuché un disparo. De pronto vi que a mi hijo lo llevaban herido en una moto. Al llegar al CAP de La Candelaria lo encontré muerto. Solo pido justicia y que los responsables paguen”, dice Jennis Blanco.