Mujer embarazada se bañó en gasolina y se prendió fuego

Una mujer embarazada se roció con gasolina y se prendió fuego en presencia de su hijo de 7 años en medio de una profunda depresión. Quemaduras de primero y segundo grado en el 70% de su cuerpo la mantienen recluida en el Hospital General de Barranquilla. Los hechos ocurrieron a las 8 de la noche del pasado lunes en una pequeña vivienda del populoso barrio Siete de Abril (suroccidente de Barranquilla), donde reside con su madre y sus dos hijos. De no haber sido por los vecinos que escucharon los gritos desesperados del pequeño, Alana Patricia Vallejo Rodríguez, de 23 años, hubiera muerto en pocos segundos. Quienes la socorrieron la encontraron envuelta en llamas en la sala de su casa y entre todos hicieron lo posible por trasladarla rápidamente al centro asistencial, donde los galenos que la recibieron se dieron cuenta de que la mujer tiene tres meses de embarazo. Según sus allegados, la fatídica decisión la habría tomado porque sufre una adicción a las drogas y, además, su compañero sentimental está preso, lo que le generó el estado de depresión desde hace días. En la camilla del pabellón de quemados dijo entre sollozos que nadie la quiere y que no quiere seguir viviendo. CONDUCTA SUICIDA De acuerdo con lo que manifestó su madre, varias veces había amenazado con rociarse gasolina y prenderse fuego, como la forma más fácil de quitarse la vida. Sin embargo, sus parientes informaron que no es la primera vez que intenta quitarse la vida. En anteriores oportunidades había ingerido un potente veneno y se había cortado las venas. En las últimas dos semanas 6 personas se han quitado la vida, lo que mantiene preocupadas a las autoridades del departamento del Atlántico.