Sucesos


Pandilleros siembran el terror en Maria Cano

YESSICA SALAS RIVAS

24 de noviembre de 2010 12:01 AM

En el barrio María Cano se puede sentir el miedo de sus habitantes con sólo mirarlos. Nadie se atreve a salir a la calle porque no quieren quedar en medio de la absurda guerra que libran los pandilleros del barrio El Nazareno con los de Manuela Vergara de Curi. Su temor no es infundado, ya que el lunes a las 6:00 de la tarde padecieron un cruento ataque de pandilleros del barrio Manuela Vergara de Curi, quienes se metieron al vecino barrio María Cano buscando venganza, luego del sepelio de Luis Eduardo Ortiz Zúñiga, quien fuera asesinado el sábado en la noche. A pesar de que la muerte de Ortiz Zúñiga se dio en medio de un enfrentamiento entre pandilleros de El Nazareno y Manuela Vergara de Curi, los miembros de este último atacan en María Cano porque alias “el Chispita”, quien presuntamente asesinó a Luis Eduardo Ortiz, reside en ese barrio. María del Socorro Henao fue testigo del ataque, que dejó cuatro personas heridas, entre ellas una niña de 10 años de edad. La mujer relata que estaba en su casa viendo televisión cuando sintió la algarabía en la calle. Cuando se asomó, vio gran cantidad de jóvenes en la calle armados con piedras y palos. Eso fue en la noche del lunes. Los pandilleros la emprendieron contra los ventanales y los techos de las casas. Se reportaron daños en más de 10 viviendas. “Eran muchos jóvenes, había incluso mujeres, estaban todos con piedras lanzándolas a las casas. A mí me partieron las ventanas y a muchos vecinos también. Todo el mundo se encerró en sus viviendas, no había nada más que pudiéramos hacer”, dijo Henao. Los desmanes duraron más de una hora, hasta que un escuadrón de la Policía llegó y tomó el control del barrio. Anunciaron el ataque La Policía reportó la captura de 8 pandilleros. Cuatro de ellos fueron judicializados por los delitos de lesiones personales y daño en bien ajeno. Otra moradora de María Cano dice que el ataque fue anunciado, ya que los pandilleros mandaron a decir con un habitante del barrio que se encerraran desde temprano, ya que después del entierro de Luis Eduardo Ortiz iban a llegar a “cobrársela”. “Nosotros sabíamos que después de ese entierro se iban a formar problemas. Yo encerré a mis hijitos desde temprano”, dijo la habitante. Pero la amenaza no quedó allí, los pandilleros también dijeron que se tomarían la Institución Educativa María Cano. Por eso ayer, el centro educativo permaneció vacío, ya que ninguna madre se atrevió a mandar a sus hijos al colegio por temor de que algo malo pudiera sucederles. Sólo miembros del Esmad de la Policía aparecieron a evitar que los pandilleros cumplieran su amenaza. “Nadie vino a estudiar hoy (ayer). Todos están asustados de lo que puedan hacer los pandilleros”, dijo el vigilante de la institución. Policía se tomó el barrio Ayer en María Cano se vivía una calma tensa. La Policía se tomó el barrio para evitar más desordenes. Patrulleros de la Policía apoyados por miembros del Esmad y hasta un helicóptero de ese organismo hacían patrullajes permanentes. Los uniformados dijeron que se quedarían en el barrio hasta nueva orden. Los policías permanecen en la institución educativa del barrio y en los puntos donde los pandilleros se citan a pelear. “Han tenido oportunidades”: Policía Hace 7 meses la Policía Comunitaria de Cartagena inició un proceso de resocialización para 70 jóvenes de los barrios El Nazareno y Manuela Vergara de Curi. Durante ese tiempo se firmó un pacto de paz y se iniciaron procesos educativos y deportivos. “Los hemos capacitado con el Sena en procesos productivos para que aprendan un oficio y puedan salir adelante, ya que se quejaban de falta de oportunidades. También hicimos campeonatos deportivos, capacitaciones en construcción y hasta asesoría espiritual para que los jóvenes cambiaran, pero nada parece servir con ellos”, dijo un vocero de la Policía. El vocero añadió que los jóvenes pandilleros han tenido todas las oportunidades para cambiar, pero no han querido hacerlo. Según la Policía, alias “el Chispita” se negó a participar en el proceso de resocialización. El menor de 17 años de edad, fue capturado por la Policia por el asesinato de Luis Eduardo Ortiz.

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