Los hechos se registraron en el barrio Nueva Providencia ayer lunes a las 6:30 de la tarde mientras varios menores jugaban en la calle.
Según la mamá del menor, Margarita Cortés, ella estaba sentada en la terraza de su casa vigilando el juego de su hijo con otros niños, desde donde advirtió el ataque del canino.
“La dueña del perro vive en la otra cuadra y desde allá se vino ese animal, de pronto al ver a los niños correr se alteró. Cuando mi hijo corrió el perro lo prendió por la nalga y lo sacudió. Al ver esto yo recogí varias piedras y se las tiré y unas vecinas me ayudaron, también a lanzarle un palo para que soltara al niño”, cuenta Margarita.
El menor fue trasladado a la clínica Madre Bernarda donde le cogieron diez puntos de sutura. El niño sufrió mordeduras en los gluteos y en la pierna derecha.
El ataque del perro desencadenó una disputa entre la dueña del animal y los vecinos que salieron en defensa del niño.
“Es que ese perro es rabioso y siempre permanece en la calle, esta no es la primera vez que ataca por aquí. A un niño de 10 años, en estos días el perro se le abalanzó, pero él logró esquivarlo y sólo lo rasguñó en la espalda ”, precisó Gerardo Varela, vecino del sector.
“A nosotros lo que nos tiene indignados es que la dueña del perro no pidió disculpas en ningún momento por el ataque de su animal hacia mi hijo, sino que al contrario en vez de mostrarnos el certificado de vacunación del Dadis, nos exigió constancia de las vacunas del niño”, precisó Raúl Saldarriaga, padre del niño mordido.
Por su parte, Maribel Mendivil, propietaria del perro, afirmó que ella respondió con las medicinas del niño, lo que fue corroborado por la madre del menor; y explicó que al perro, Tolleto, como se llama, que es una mezcla de pitbull y labrador, se lo iba a llevar para otro sitio a fin de evitar nuevos problemas en la comunidad.
“La falla estuvo en que mi hijo se descuidó y el perro se salió y llegó hasta allá y allá al parecer lo hostigaron con piedras y el animal se puso agresivo”, dijo Mendivil.
Las autoridades
El padre del niño, Raúl Saldarriaga, comentó que este martes en la mañana estuvo con la dueña del perro en la inspección de Policía del barrio El Recreo, donde no le recibieron la denuncia.
“Me dijeron que debía dirigirme a la Alcaldía 3, pero la dueña del perro sacó evasivas. Yo lo que quiero es que ella firme un documento donde se comprometa a responder por lo que necesite mi hijo en consecuencia a las mordeduras que le hizo el animal, pero ella no quiere hacer eso, y si una autoridad no interviene, ella no lo va a hacer”, explicó Saldarriaga.
Álvaro Ramírez, médico veterinario, de la Umata, precisó que en estos casos, la norma contemplada en la Ley 84 de 1989, indica que el primer paso a seguir es la instauración de la denuncia por daño a tercero en una inspección de Policía.
“La víctima o los familiares de la víctima deben hacer llegar la copia de la denuncia a la Umata y la IPS que haya prestado la atención, en este caso Madre Beranarda, debe reportar el hecho al Dadis. Esto para que ambas entidades hagan un diagnóstico de la salud del animal. Además de esto, la Ley 746 de 2012 señala que los propietarios de perros considerados de raza agresiva deben adquirir una póliza de daños contra terceros o en su defecto responsabilizarse de pagar todos los daños que cause el animal”, explicó Ramírez.
Sucesos
Perro ataca a niño de cinco años
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