Salió a cumplir una cita y lo matan sicarios en moto

El crimen de Henry de Jesús David Cano ocurrió el miércoles en la noche en el barrio Santa Mónica, pero su cuerpo aún no ha sido reclamado en la morgue de Medicina Legal. Funciones forenses confirmaron que ningún familiar se había presentado hasta anoche a ese organismo para ampliar la escasa información que se tiene de la víctima y para darle sepultura. En Medicina Legal sólo se sabe que David Cano tenía 40 años, era oriundo de Mutatá, Antioquia y residía en el corregimiento de Pasacaballos. Murió al recibir tres balazos, uno de éstos en la parte posterior de la cabeza. La versión que se conoce de testigos indica que Henry David caminaba por la puerta de un almacén cuando dos individuos en moto se le acercaron por la espalda y uno de ellos, el parrillero, le disparó a quemarropa y sin mediar palabras. “Yo iba caminando cerca de ahí cuando escuché los tres disparos. El señor cayó al suelo mientras que los sicarios se fueron en la moto por la Troncal de Occidente. “Tres señores que estaban cerca se lo llevaron a la Clínica Madre Bernada, pero ya iba sin vida. El asesino ni siquiera se bajó de la moto”, cuenta una residente del sector. Investigadores de la Sijín analizan la versión de que les entregó una fuente y que deja entrever que a Henry David Cano lo llamaron a su celular en la tarde y le pusieron una cita en Santa Mónica. La Policía también indaga sería la misma persona que en enero del 2006 fue capturado por homicidio y en abril de ese mismo lo retuvieron por porte ilegal de arma de fuego. A Henry David Cano lo tuvieron encerrado durante varias horas en la antigua Estación de Policía en Blas de Lezo. Las autoridades desconocen qué sucedió con él posteriormente. Lo que si es cierto es que pese a los señalamientos que le hicieron en diferentes meses del 2006, en ambos recobró la libertad. Pese a esta última información, se cree que por el último delito fue encarcelado y habría recobrado la libertad hace apenas un mes. El Universal logró conocer que en el operativo que David Cano fue aprehendido por primera vez, la Policía desmanteló una presunta banda de sicarios y extorsionistas que operaba en el barrio Nelson Mandela y sus alrededores. Los supuestos miembros de la banda fueron sorprendidos en una casa utilizada para planear los asesinatos y recolectar los dineros producto de las extorsiones a comerciantes y residentes del barrio Nelson Mandela y sectores aledaños. De Henry de Jesús David Cano se informó en ese entonces que tenía una gallera en Nelson Mandela.