Una pedrada en el pecho mató a Henry Cantillo De Ávila en una riña callejera que ocurrió el sábado a medianoche en el barrio Altos de San Isidro. Sus familiares dicen que Cantillo estaba durmiendo en su habitación cuando escuchó el alboroto por una pelea en la calle. “Él había llegado borracho y se fue a buscar a sus dos sobrinos. Al salir, le dieron con una piedra. Lo llevamos al CAP de Los Cerros pero al poco tiempo falleció”, cuenta su madre. En los hechos resultaron heridos los hermanos Ronald y Rodolfo Castro Cantillo. El primero de ellos está en delicado estado de salud en la Clínica San Juan de Dios. Otra versión que entregó la Policía deja entrever que uno de los sobrinos de la víctima estaría implicado en su muerte. Henry Cantillo trabajaba como repartidor de leche y era oriundo de Villanueva. Sus restos son velados en esa población.
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