En la mañana de este miércoles un taxista protagonizó todo un escándalo en Cartagena.
Jhonatan Ortiz Martínez, conducía el taxi de placas WGM 035 bajo los efectos del alcohol, cuando colisionó con otro vehículo estacionado en la calle principal del barrio Villa Fanny.
Pero ahí no quedó todo, debido a su estado, este se rehusó a practicarse la prueba de alcoholemia y a la inmovilización del vehículo, por lo que fue llevado a la estación de Policía de Los Caracoles, donde le propinó una trompada en el rostro a un agente de la Policía.
Tras manejar en estado de embriaguez y negarse a la prueba, se le impuso la sanción máxima establecida, que es aproximadamente $33 millones y la suspensión de la licencia de conducción por más de 5 años.
Además fue detenido por la Policía. Según el nuevo Código de Policía este podría ser sancionado con $735.418 pesos por irrespetar a la autoridad, incumplir e interrumpir la labor o agredir de cualquier manera a un uniformado.
Horas después el infractor fue dejado en libertad.
Más infractores
En lo corrido del 2017 los operativos del Departamento Administrativo de Tránsito y Transporte (Datt), han dado como resultado 370 conductores sancionados por conducir bajo los efectos del alcohol.
Tan solo a inicios de octubre el Datt, sancionó también al conductor de taxi identificado como José Saldaña, quien conducía el taxi de placas TEQ 566, este resultó positivo en embriaguez en segundo grado. El vehículo quedó inmovilizado y afronta una sanción de aproximadamente $8 millones. (Lea aquí: Datt sanciona a taxista por manejar en estado de embriaguez)
Más operativos
El director del DATT, Edilberto Mendoza Goez, afirmó que la institución realizará de manera constante este tipo de operativos para conductores de taxis, buses y busetas de servicio público atendiendo requerimientos de la ciudadanía.
El ente de transporte continuará con la ejecución de operativos de control en diferentes puntos de la ciudad, toda vez que pese a las campañas de prevención, advertencias y la promulgación de la Ley 1696 de diciembre de 2013, que agrava las sanciones a conductores embriagados, siguen presentándose casos de personas conduciendo en estado de embriaguez.
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