Fracasa vuelo de prueba de aeronave militar supersónica de EEUU

Una aeronave experimental no tripulada fracasó en su intento de volar a una velocidad seis veces superior a la del sonido, en un nuevo revés para el desarrollo del vuelo supersónico.
El aparato X-51A Waverider fue diseñado para que alcanzara mach 6, o 5.800 kph (3.600 mph), tras ser lanzado el martes desde un bombardero B-52 sobre el litoral de California.
Los ingenieros esperaban que la nave sostuviera su máxima velocidad durante cinco minutos, el doble de tiempo que en el anterior vuelo de prueba de un X-51A.
La Fuerza Aérea dijo el miércoles que una falla en una aleta de control impidió el encendido del motor vanguardista de la aeronave y se perdió.
"Es desafortunado que un problema con este subsistema causara la terminación (de la prueba) antes de que pudiéramos encender el motor de combustión supersónica (de la aeronave)", comentó en un comunicado Charlie Brink, del laboratorio de Investigación de la Fuerza Aérea en la Base Wright-Patterson de la Fuerza Aérea en Ohio.
El Waverider se separó sin problemas del B-52 y encendió su impulsor cohete conforme a lo previsto.
Después, debía encenderse el motor de propulsión supersónica de la aeronave para que la velocidad de ésta se incrementara a mach 6, lo cual nunca ocurrió.
Quince segundos después de que se separara del impulsor cohete, el Waverider perdió el control y no se pudo probar el motor de combustión supersónica.
"Toda la información que teníamos mostraba que habíamos creado las condiciones correctas para la ignición del motor y teníamos mucha expectativa de probar nuestros objetivos", señaló Brink.
El Pentágono ha estado probando tecnologías supersónicas para realizar ataques en cuestión de minutos en diversos confines del mundo.
Este fracaso es el mas reciente dentro del programa del Waverider. Un vuelo de prueba efectuado en 2011 terminó prematuramente cuando se intentó reanudar el encendido del aparato, el cual cayó en el Océano Pacífico.
Durante el primer vuelo de prueba de un X-51A en 2010, la nave alcanzó durante tres minutos una velocidad casi cinco veces superior a la del sonido.
Sólo queda un vehículo X-51A. La Fuerzas Aérea no ha decidido si dispondrá el vuelo de la aeronave.