Pasar y reparar las calles de un barrio en busca de un sitio apto para parquear -o mal parquear- su vehículo, es una acción que con frecuencia realizan los conductores en Cartagena. Se ven obligados a eso porque en la ciudad, como es evidente, no hay suficientes estacionamientos.
La causa de la problemática no es una sola, tiene dos caras. De un lado, muchos establecimientos no construyen el número de parqueaderos que les ordena el Plan de Ordenamiento Territorial (POT); de otro, hay establecimientos que sí cumplen lo normado, pero se quedan cortos ante la demanda.
En diálogo con El Universal, el secretario de Planeación, Iván Castro, aseguró que los establecimientos considerados de alto impacto urbanístico son los que más dejan sin parqueo a los cartageneros.
“Las iglesias, generalmente no proveen parqueaderos. Los centros recreativos tampoco. Lo mismo pasa con las universidades, donde por tener profesores, estudiantes, personal administrativo, se necesita un número de parqueaderos que pueda atender la demanda”.
De alto impacto
El POT clasifica en el nivel “Institucional 3” a los establecimientos de alto impacto y los divide por tipos así:
Asistencial: hospitales, clínicas generales.
Educativo: universidades, escuelas militares, institutos tecnológicos.
Administrativo: alcaldía, gobernación, juzgados, centros administrativos, cabildos, sedes de empresas de servicios públicos y equipamientos de transporte.
Cultural: teatros, auditorios sinfónicos, bibliotecas, hemerotecas, museos, ferias de exposición y centros de convenciones.
Seguridad: cuarteles, cárceles, instalaciones militares y de Policía, Fiscalía, Base Naval.
Culto: catedrales, palacio arzobispal.
Recreativo: centros deportivos, Plaza de Toros, Villa Olímpica, parques y zonas verdes de cobertura distrital, unidades deportivas.
Establece que en los de tipo asistencial y educativo se debe construir un espacio para parqueo por cada 25 metros cuadrados (m²) de área construida dentro del área privada. Y por cada tres parqueos para residentes, debe haber uno para visitantes.
En los de tipo administrativo y cultural no se exige estacionamientos, mientras que para los de seguridad, uno por cada 25 m² de área construida dentro del área privada y para visitantes, uno por cada tres cupos privados. Para establecimientos tipo culto y recreativo se exige: uno por cada 10 m² de área construida dentro del área privada y para visitantes, uno por cada tres cupos privados; y uno por cada 30 m² del lote dentro del área privada y para visitantes, uno por cada tres cupos privados, respectivamente.
Qué se puede hacer
El secretario de Planeación recalcó que ante la escasez de parqueaderos “se tiene que hacer control urbanístico a los establecimientos y existe una posibilidad, que está en el Acuerdo 45 (por el cual se expide el Plan de Desarrollo de Cartagena 1989-2010 y sus instrumentos de ejecución), que ellos definan edificios adicionales para el desarrollo de parqueaderos. Tendrían que estar en un radio de 200 metros alrededor del edificio”.
Resaltó que en Manga “los edificios están cumpliendo con la norma de parqueaderos, pero el barrio está saturado, todas las calles están llenas de vehículos porque trabajan con el mínimo de estacionamientos que exige la norma. El nivel socioeconómico de una familia en Manga da para tener dos o tres vehículos y los edificios, por norma, tienen un parqueadero por apartamento”.
Señaló que en este, al igual que en barrios como Bocagrande, El Campestre, Santa Mónica y El Country, “hay que mirar cuál sería la estrategia para el desarrollo de parqueaderos como negocio, para poder atender la demanda, porque llega el momento en que vas por una calle y ves que le van colocando postes para evitar que un vehículo cualquiera se parquee frente de la casa, porque ese es el parqueadero de la casa.
“La solución de parqueaderos en nuestro urbanismo está para hacerse al interior del predio privado y no en el espacio público como se acostumbra a hacer. Tenemos que buscar una política que estimule el desarrollo de parqueaderos en los diferentes barrios de la ciudad, que en esos sectores donde las casas no tienen parqueadero, una persona que pueda desarrollar un lote o un edificio de parqueadero y todo el mundo llegue ahí”.
De menor impacto
Según el POT, son establecimientos de bajo impacto ambiental y urbanísticos, nivel “Institucional 1”, aquellos que no generan tráficos o congestión notoria, tampoco ruidos o contaminación, ni propician usos complementarios significativos. Estos son:
Asistencial: puestos de salud, dispensarios, salas de cunas, centros comunales.
Educativo: guarderías, jardines infantiles, educación preescolar.
Seguridad: puestos de Policía, CAI, puestos militares.
Culto: capillas, salas de culto.
Recreativo: clubes campestres, parques y zonas verdes de cobertura local.
En este nivel no hay establecimientos de tipo administrativo ni cultural. Y son “Institucional 2” los establecimientos públicos o privados, de mediano impacto, de cobertura zonal compatibles con el uso residencial.
Asistencial: centros de salud, clínicas, ancianatos, hogares de paso.
Educativo: colegios, centros de educativos tecnológicos, seminarios.
Administrativo: JAL, embajadas, consulados, notarías, curadurías, comisarías de familia, inspecciones de Policía.
Cultural: teatros, auditorios, museos, bibliotecas.
Seguridad: subestaciones o estaciones militares o de Policía y Bomberos.
Culto: iglesias, sedes de cultos, conventos, salas de velación.
Recreativo: centros deportivos y de espectáculos, clubes sociales, parques de diversión, parques y zonas verdes de cobertura zonal.
En cuanto a estacionamientos, los de tipo asistencial y educativo niveles “Institucional 1” e “Institucional 2” deben tener uno por cada 20 m² de área construida dentro del área privada.
Los de tipo administrativo “Institucional 2”, así como los de seguridad en general, uno por cada 25 m² de área construida dentro del área privada. Tipo culto: uno por cada 10 m² de área construida dentro del área privad. Recreativo niveles 1 y 2, uno por cada 30 m² del lote. Todos los mencionados deben tener un parqueo para visitantes por cada tres cupos privados.
¿Adiós al mal parqueo?
El funcionario sostuvo que el desarrollo de edificios y lotes destinados al parqueo contribuiría al fin del mal parqueo de vehículos en vías públicas o áreas de espacio exclusivas para los peatones, que en lo transcurrido del año han ocasionado la imposición de 2.306 comparendos.
“El DATT puede retirar los vehículos mal parqueados, pero sin parqueaderos el problema va a persistir, va a ser como un círculo infinito, porque mientras pasa el DATT con su grúa todo el mundo se quita, apenas se va la grúa todo el mundo vuelve y se coloca. Antes de entrar en ese juego del gato y el ratón es mejor plantear soluciones que permitan evitar ese desgaste en el que entra tanto la administración como el dueño del vehículo”.
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