El arzobispo de Cali, monseñor Darío de Jesús Monsalve, le pedirá al Gobierno que autorice una tregua bilateral de 30 días para permitir la liberación de dos soldados que permanecen en poder del ELN, lo que implicaría un gesto de buena voluntad que facilitaría un acercamiento para reactivar los diálogos exploratorios con esa guerrilla.
Así lo anunció este miércoles el prelado de la Iglesia Católica tras confirmar un cruce de cartas con el líder del grupo insurgente, alias Gabino, quien valoró “sus muy valiosos esfuerzos por la paz de Colombia” y consideró “importante que junto a ese clero con el que usted comparte este sentir, continúe sin desmayo -como buen cristiano- en tan importante tarea”.
En la misiva enviada el pasado domingo, el ELN también afirma que “estamos convencidos que pronto superaremos los escollos que han interrumpido los diálogos con el actual Gobierno” y que “tal interrupción no obedece a una conducta negligente de nuestra parte; más adelante se podrá esclarecer dónde estuvo el atranque, para que todos conozcan la realidad”.
Según ‘Gabino’, “es oportuno reiterar ante usted la urgencia que vemos en el Ejército de Liberación Nacional de acordar un cese bilateral del fuego y las hostilidades que genere un clima favorable para continuar el proceso”.
Por su parte, monseñor Monsalve respondió este miércoles con otra carta en la que le expresa a la guerrilla que “desde la Conferencia Episcopal y nuestra comisión de cinco obispos y el padre Echeverry, estaremos reuniéndonos de inmediato y buscando contactos urgentes con Presidencia y la delegación oficial, lo mismo que con ustedes, para precisar, si fuere necesario, la siguiente reunión exploratoria que, esperamos, sea la CONCLUSIVA para llegar a la fase pública (de los diálogos)”.
El arzobispo añadió que “nos preocupa mucho la seguridad, la salud y la liberación más pronta de las personas en poder del ELN”, por lo que reiteró su propuesta al Gobierno y a la guerrilla para que haya un cese temporal de las acciones de ambas partes que permitan la liberación de los miembros de la Fuerza Pública secuestrados.
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