El alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, precisó este miércoles el futuro de lo que será la construcción del metro de la ciudad, para lo cual se comprometió a la primera fase, que será elevado-aunque evalúa que sea subterráneo en algunos tramos- y que en diciembre estará lista la licitación.
Las precisiones las hizo el mandatario en su primera rueda de prensa con los medios de comunicación, en donde precisó que la inversión prevista para las vías, incluyendo metro y troncales de Transmilenio, se llevarán una inversión cercana a los 25 billones de pesos, incluyendo recursos propios de la ciudad, del gobierno y los que lleguen por la vía de los acuerdos público privados.
“No hay ninguna posibilidad de hacer el metro subterráneo con los recursos que se asignaron hace dos años y medio. No se cubrirían los costos si tomáramos esa decisión”, señaló Peñalosa.
Frente al metro insistió en que se tiene el apoyo del gobierno central, “este es el metro de Santos, es él quien pone el dinero y estamos trabajando con ellos”.
Informó que la primera fase de la primera línea arrancará en el suroccidente de Bogotá e irá hasta la calle 26, sin embargo esta no la previó dentro del plan de obras de su administración.
Señaló que en estos momentos se hacen análisis y estudios, con el apoyo de la Financiera de Desarrollo Nacional, para ver la posibilidad de que la primera línea cuente con tramos elevados y subterráneos.
Frente a otros obras, Peñalosa sostuvo que hay dudas sobre la calidad de los diseños de la troncal de TransMilenio por la avenida Boyacá, hechos por el propio Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) durante la anterior administración-
“Vamos a revisar esos diseños con el fin de hacer una buena troncal. Actualmente, se trata de diseños que no tienen el grado de detalle necesario. En un futuro, si los dejamos así, se podrían generar pleitos y grandes sobrecostos”, explicó.
Planteó que las troncales prioritarias de su Administración serán la carrera 7ª., la Boyacá y extender la Caracas hasta Usme.
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